En mayo de 2012 vence la concesión de Netoc en la terminal de ómnibus de Córdoba, administración que tiene a su cargo desde 1988 y que ya tuvo dos prórrogas, la última en el mes de febrero de 2010. Es por ello que, anticipándose a lo que vendrá, los locatarios crearon Complejo Terminal de Ómnibus de Córdoba SA, una sociedad que presentó hace aproximadamente un mes una iniciativa privada a la Provincia, que contempla un plan de obras para la refuncionalización del edificio de la actual terminal de ómnibus (proyecto a cargo del arquitecto Alberto Roganti) y la explotación comercial de la vieja y de la nueva terminal por el termino de 25 años. En total, son unos 60 locales, sumando los más de 20 de la actual terminal y los 35 que albergará el nuevo edificio, según estipulado en el proyecto que está ejecutando.
Para dar una idea de la dimensión de un contrato de esta envergadura, actualmente la terminal gasta unos $ 100.000 en limpieza y $ 40.000 de electricidad.
El proyecto para poner en valor el actual edificio de la terminal tiene por fin contrarrestar de alguna manera el éxodo de público una vez que inaugure el nuevo edificio. Hoy en día se calcula que diariamente visitan la terminal unas 80.000 personas, cifra que seguramente se reducirá a la mitad cuando comience a operar el nuevo edificio. Así las cosas, la idea es mejorar el lugar a fin de convertirlo en un paseo de compras y de entretenimiento que sea atractivo para el público.
Locatarios quieren la explotación comercial de la antigua y de la nueva terminal (prometen $ 400 millones y piden 25 años)
Complejo Terminal de Ómnibus de Córdoba SA es el nombre de la nueva sociedad creada por los actuales locatarios de la terminal de ómnibus de Córdoba, la cual podría convertirse en la futura concesionaria de la vieja y de la nueva terminal si prospera la iniciativa privada que presentaron ante la Provincia. Claro que para alcanzar su objetivo deberían concretarse algunos pasos: primero, que el gobierno provincial acepte la propuesta, luego que convoque a una licitación y, finalmente, ganar la compulsa (correrían con una ventaja de 7% sobre la competencia por haber sido los impulsores). La iniciativa, comandada por Carlos Escalera (Bolsa de Comercio), contador de los locatarios, propone la explotación comercial de ambas terminales (unos 60 locales en total) por el término de 25 años.
En ese periodo, según estima la nueva sociedad, la administración de la terminal demandará unos $ 400 millones. La propuesta contempla además la puesta en valor del antiguo edificio, para lo cual destinarán $ 10 millones, y un plan de inversiones cada 6 años para su mantenimiento.