Seguro escuchaste hablar sobre el tratamiento de láser CO2 en la piel o viste algún video en TikTok sobre esta tendencia. Si bien se pueden encontrar muchos lugares que utilizan esta herramienta para tratamientos en sus pacientes, no todos están capacitados para utilizarlo de manera correcta, generando posibles efectos adversos (para nada recomendables).
Para ahondar sobre este tema, dialogamos con Ana Carolina Facchin, directora general de Blossom Medical Beauty, centro de medicina estética y salud ubicado en Nueva Córdoba.
El láser CO2 es una tecnología que utiliza una luz de alta energía para vaporizar las capas superficiales de la piel de manera controlada. Este proceso estimula la producción de colágeno, una proteína esencial para la elasticidad y firmeza de la piel, promoviendo así la regeneración celular y mejorando la apariencia general.
El tratamiento puede ser ablativo (que elimina capas completas de la piel) o fraccionado (que trata zonas específicas dejando intacta la piel circundante), dependiendo de las necesidades del paciente. “Los resultados e indicaciones estéticas de los láseres de CO2 y los láseres fraccionados no son los mismos y cada uno tiene ventajas específicas según la patología o el objetivo del tratamiento”, indica Ana.
El láser CO2 tradicional es recomendable para arrugas profundas, cicatrices severas de acné o quirúrgicas, pieles dañadas por el sol, flacidez leve a moderada ya que es más “agresivo”, ideal para personas mayores a 40 años. Este tratamiento logra una mejoría notable con un solo tratamiento, pero requiere un mayor tiempo de recuperación.
En contraparte, el láser fraccionado lo recomiendan para arrugas finas o moderadas, cicatrices moderadas, manchas y pigmentación, piel más joven o áreas delicadas. Al ser más seguro y versátil, el tratamiento puede requerir varias sesiones para un efecto comparable al CO2 tradicional. “El láser CO2 trabaja en profundidad, con mucha energía y es muy ablativo. Es genial, pero tiene un post-tratamiento un poco complejo. En una época los láseres CO2 los utilizaban dentro del quirófano”, explica la doctora.
En Blossom cuentan con un área médica y los tratamientos de láser tienden a ser mayores durante el invierno ya que los rayos UV y el sol son muy dañinos y si el paciente se ha hecho dos o tres sesiones, la piel tiende a quedar susceptible. “El tratamiento es unisex y es fundamental que el profesional que lo realice esté capacitado”, comenta Ana.
Pero ahora bien, ¿cuánto sale realizarse un tratamiento con láser? Según la directora, la tarifa del mismo va a depender de la duración y de la marca, porque hay marcas que “tienen consumibles muy caros y hay marcas que no tienen consumibles” (el consumible es el aplicador que se le coloca al aparato para que tenga contacto con la piel). Puede comenzar desde los $ 200.000 hasta los $ 600.000 aproximadamente.
“La elección final dependerá de las condiciones específicas de la piel del paciente, su tolerancia al tiempo de inactividad y el objetivo estético que se busque”, concluye Ana.