La emprendedora relató que en un año duro -la facturación crecerá apenas 5% respecto al año pasado- la cantidad de revendedoras se ha incrementado por la necesidad de un ingreso extra que hay en muchas familias.
Por otra parte, explicó que si bien hay una demora de casi 18 meses en los planes de desembarco en Brasil, ya hay más de un centenar de revendedoras en Porto Alegre y en diciembre abrirá oficinas en Minas Gerais y Río de Janeiro.
“El proyecto de Brasil es muy grande: para darte una idea el modelo en Argentina está pensado para hasta 50.000 revendedoras y allá ese número puede llegar a 350.000”, le dijo a este medio.
Sin problemas para las importaciones
El 90% de los productos que comercializa VD son importados por lo que en tiempos de cepo, la consulta era casi obligada: “No tenemos problemas porque demostramos que generamos mucho trabajo interno además de la venta de nuestros productos: imprimimos decenas de miles de catálogos, invertimos en obras, etcétera. Presentamos un balance detallado de todo lo que generamos y tanto (Guillermo) Moreno como (Augusto) Costa comprendieron”, explicó.