Petroquímica Río Tercero invierte US$ 3,5 millones para ser la número uno

Convertirse en el primer productor nacional de ácido clorhídrico es la razón por la cual Petroquímica Río Tercero invirtió US$ 3,5 millones en una nueva planta, que le permitirá incrementar su capacidad de producción de 90.000 a 170.000 toneladas por año. El desembolso forma parte del plan estratégico de inversiones iniciado por la fábrica en 2007, en el cual se llevan invertidos US$ 50 millones, y que culminará en el año 2016 con inversiones por otros US$ 50 millones.
La puesta en marcha de la nueva planta permitirá, en una primera etapa, incrementar en US$ 10 millones las exportaciones de Policloruro de Aluminio (PAC). En total, la empresa exporta anualmente productos por US$ 45 millones.

El ácido clorhídrico es un decapante-desoxidante de la industria sidero-metalúrgica, también utilizado en la minería, en la industria petrolera, papelera, de la construcción y química en general. Asimismo, se emplea en la fabricación de agroquímicos, productos veterinarios, elaboración de PVC, procesos de estampado en la industria textil, neutralización de lejías en la industria jabonera y producción de productos farmacéuticos.
El complejo industrial de la empresa, de más de 170.000 m2 de superficie y ubicado en la ciudad de Río Tercero, está integrado por cinco unidades de producción encadenadas para la fabricación de Disocianato de Tolueno (TDI) como principal producto, empleando 340 personasen forma directa y 1.400 en forma indirecta. Asimismo, produce y comercializa, además de TDI y ácido clorhídrico, soda cáustica, hipoclorito de sodio y policloruro de aluminio entre otros, totalizando anualmente la producción de más de 190.000 toneladas de productos en graneles líquidos y gasesindustriales.

YPF reconfigura el mapa energético del NOA con dos movimientos clave

YPF dio dos pasos estratégicos que redefinen el escenario energético y productivo del Noroeste Argentino. La adquisición del 100% de Refinor y el anuncio de la reactivación de una planta para biocombustibles en Salta marcan una apuesta integral por la región, con impacto directo en el mercado de combustibles y en la industria sucroalcoholera.