Aunque su libro recién saldrá a la luz en el primer trimestre del año próximo, el especialista y uno de los referentes regionales del mundo tecnológico anticipó parte del tema que tratará esa publicación en una entrevista con InfoNegocios.
“Los ejecutivos y CEOs y las empresas están cada vez más expuestos al control social, a través de las redes sociales. La gente se ha acostumbrado a tener la capacidad de opinar, denunciar y además de difundir la información en tiempo real”, explica.
Y además, agrega, que hay una generación entera “que ya no conoce otra forma de comunicarse y no reconoce otra forma de expresarse. Este factor ha hecho que el componente de percepción y reputación sea algo que tenga un peso mucho mayor que antaño, ya no importa el tamaño de la empresa u organización. Es imposible que una empresa quede al margen de esta realidad. Debe lidiar con este fenómeno”, señala.
Arévalos sostiene que las crisis reputacionales obligan a modificar cómo se desarrolla el negocio y que va más allá de un problema de comunicación. “Las comunicaciones son un problema muy importante para dejarlo sólo en las manos de los comunicadores. La gerencia tiene que entender que la comunicación -hoy en este mundo interconectado- es una herramienta de gestión, no una función de marketing”, manifiesta.
Ante esta situación, la clave es saber escuchar. “Internet es un focus group abierto las 24 horas donde las empresas están expuestas. El desafío de un CEO hoy es estar sentado en una oficia de cristal, ya no podrá estar sólo y en un lugar secreto”, dice y explica que ya no se podrá escapar del monitoreo permanente.
“Lo importante es entender, escuchar y empezar a relacionar nuestra marca con algunas palabras, pero sabiendo que hay un cambio cultural que llegó para quedarse”, finalizó.