El Sondeo de Expectativas de Líderes de la firma BDO fue el tercero en confirmar esta semana lo que parece ser un quiebre las expectativas del sector privado: la encuesta de opinión a 100 líderes empresarios de medianas y grandes empresas que facturan unos $ 360.000 millones en total, determinaron que un 52% espera que aumenten las ventas reales contra un 37% ven más recesión.
En ese sentido, 7 de cada 10 encuestados dijo que la inflación era su mayor preocupación.
El dato complementario es que las expectativas de los privados es que los precios empiecen a disminuir de manera constante, tal como se dio en las mediciones de inflación entre junio y mayo.
El Relevamiento Expectativa de Mercado (REM) del Banco Central marca una desaceleración en la variación mensual desde 2,2% para julio de 2016 hasta 1,6% en diciembre del presente, lo que implica una tasa anualizada de inflación del 21%.
La misma dirección recogió la encuesta de expectativas de inflación de la Universidad Torcuato Di Tella, que determinó que a nivel nacional la inflación esperada para los próximos doce meses se reduce a 25%.
Esa misma entidad mide el Índice de Confianza del consumidor, que fue levemente positivo en junio pasado (+0,2%). Este indicador revela con relativa rapidez el "humor" de los consumidores, que determinará las decisiones de compra a corto y mediano plazo y por lo tanto la evolución de los indicadores macroeconómicos en los próximos trimestres.
Desde el lado de la oferta parecen haberlo advertido: aunque pasó prácticamente desapercibido, el martes un informe de la la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) de Buenos Aires reportó que aumentó el alquiler de locales comerciales porque se estima una reactivación del consumo.
El repunte se daría en los últimos meses y de acuerdo a las estimaciones de las 25 consultoras, los 12 bancos y 9 analistas internacionales consultados en el REM la inercia de crecimiento haría que de la recesión actual se pase a un crecimiento por sobre el 3% para el año próximo.
Las expectativas también son coincidentes entre los sectores con mayor potencial de crecimiento: energía, agro y telecomunicaciones, respectivamente.
¿Y el dólar?
El sondeo de BDO a empresarios señala que a la inflación le siguen en orden descendente de preocupación: las paritarias y el tipo de cambio. En ese sentido, el REM mostró que los especialistas estiman un dólar que cierre el año a $ 16 -el jueves pasado cerró a 14,9- y para fines de 2017 llegará a los $18. (GL)