¿Cómo ven el camino de la derogación y el mega decreto? Esa fue la inquietud que le trasladamos a Lucas Bergo, presidente de la Cacic. “Al igual que todos los sectores, nos sorprendió la velocidad y el alcance, aunque desde antes de las elecciones sabíamos que era el camino elegido por el gobierno actual, porque lo expusieron de forma clara. Si bien desde el sector inmobiliario siempre se planteó como propuesta trabajar en una modificación inteligente que incentive la oferta, esto no se pudo lograr y estábamos yendo a una oferta prácticamente cero a nivel país, con incrementos anuales en contratos nuevos de entre 80 y 120 puntos arriba de la inflación”, comienza.
A mediano plazo esperan una mejora de la oferta que, como consecuencia, equilibre los valores locativos y se acerque a un punto de equilibrio más sano. “Los inquilinos necesitan tener alternativas dignas y con precios pagables y los propietarios alquileres que tengan una lógica entre su ahorro invertido y lo que perciben con cierta previsión. No nos olvidemos que los contratos se podían actualizar cada 12 meses, algo insólito en un contexto inflacionario”, señala Bergo.
Aunque no es todo color de rosas: “No podemos esperar que en 60 días se resuelva el daño que se le hizo al mercado en los últimos 3 años. Entendemos que no hay solución perfecta, pasaríamos de la regulación total y absoluta (que más que cuidar a los inquilinos los terminó perjudicando), a una desregulación grande en la cual va a ser muy importante el sentido común”.
Qué sugieren desde la Cámara
“En el corto plazo, nuestro accionar será primordial para que exista una convivencia óptima entre las partes. Es por ello que a la hora de intermediar en alquileres de vivienda alentamos tanto el cuidado de la recuperación de la rentabilidad de los propietarios como de las posibilidades del salario/ingreso de inquilinos”.
Por lo que en contratos de locación con destino habitacional sugieren:
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Que los contratos sean en pesos con una lógica en la actualización de los alquileres que no esté disociada de la realidad.
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Plazos de contratos de 2 años o más.
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Respecto a los índices a utilizar, consideramos que el ICL (Índice de Contrato de Locación) puede ser positivo, entendiendo que contempla la economía de ambas partes, tomando índice de precios y variación salarial.
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La dolarización no es una necesidad masiva para el mercado de alquileres de Córdoba, a diferencia de otras plazas como Capital Federal, que tiene una realidad distinta a la nuestra, como por ejemplo un efecto airbnb muy significativo y otra dinámica de mercado.
IN: ¿Cuál fue el primer impacto de los propietarios?
LB: Aumentaron consultas, muchas para entender la situación y empezar a analizar, y como positivo hubo también muchos llamados por parte de propietarios que se encontraban con prórrogas para evaluar la posibilidad de avanzar con esos contratos, por el plazo de 2 años. Entendiendo que nos encontramos en una Argentina sin crédito hipotecario y sin vivienda social, necesitamos de manera indispensable de la oferta de inmuebles por parte de propietarios para equilibrar el déficit actual.
Aclaración: El DNU que entraría en vigencia el próximo 29 de diciembre, no afecta a los contratos de locación firmados con anterioridad al DNU. No hay modificación a las relaciones jurídicas preexistentes al DNU. Es decir, un contrato firmado durante la vigencia de la Ley de Alquileres N° 27551 y su modificatoria 27.737 debe cumplirse con dicha ley.