La falta de acuerdo paritario entre los trabajadores de las droguerías y la “industria” podría provocar desabastecimiento en las farmacias en los próximos días.
Pero ese es el menor de los problemas que hoy tiene el sector del que dependen de manera de directa 2.500 familias en Córdoba. Desde 2013 se cerraron casi 200 farmacias (2013: 71; 2014: 65) y se estima que este año la “tasa de natalidad” será negativa porque la cifra de “muertes” de locales sería mayor a la de los “nacimientos”.
El titular del Colegio de Farmacéuticos de Córdoba, Germán Daniele, resumió los frentes más urgentes que debe atender el sector y reclamó soluciones.
Las “retenciones” del Gobierno y el caso PAMI. Las farmacias tienen una rentabilidad del orden del 30% pero para las ventas que se realizan a través de PAMI el Estado les paga un 14% menos que el precio de mercado. Además, los pagos se realizan con 3 o 4 meses de demora.
“El caso de PAMI tiene otro condimento: por una resolución (la 337), se obliga a cubrir hasta el 100% de algunos medicamentos y está sucediendo que muchas personas, incluso de alto poder adquisitivo, que han ingresado en la moratoria previsional del Estado usan PAMI. Estamos financiando al sistema”, dice.
-¿Ponemos coto a la fábrica de farmacéuticos? Daniele pone sobre la mesa un problema del que pocos quieren hablar. Las universidades siguen “despachando” farmacéuticos para un mercado que no tiene chance de recibirlos a todos. “Hay muchos chicos que se reciben con toda la ilusión, de una carrera que no es fácil, y que después se dan de bruces con la difícil realidad”.
Situación inviable. Los precios de los medicamentos se incrementaron 13% promedio en los últimos 5 años mientras que los costos lo hicieron al ritmo de la inflación. “Esta situación es inviable: si no nos dan precios, que nos den otras herramientas para mantener la rentabilidad. Sino todo esto desaparece”.
La “competencia desleal”. Para Daniele, las farmacias de las obras sociales -que están exentas de impuestos- , la falta de un límite territorial que ponga coto a la expansión de las cadenas y los controles laxos para que no se vendan medicamentos en sitios no autorizados suman más dolores de cabeza al sector.
Las soluciones que proponen. Desde el Colegio admiten que ante la falta de una política de precios, algunas soluciones pueden ser las siguientes: la autorización para que la prescripción vuelva a los farmacéuticos, lo que le permite obtener más rentabilidad. Otra opción son subsidios especiales.