El Observatorio de la Actividad Económica de Córdoba es un centro de investigación destinado a producir información técnica, a través del estudio, evaluación y monitoreo de la actividad. Al mismo tiempo, pretende ser un espacio que promueva la articulación científica y académica, con las diferentes esferas de los ámbitos públicos y privados, y la comunidad en general.
Los primeros estudios se hicieron en el marco del “Programa para el seguimiento de la actividad económica de Córdoba” que financió la propia universidad.
Índice Compuesto de la Actividad Económica de Córdoba
Así se denomina el primer trabajo que se presentó. Es un indicador sintético que refleja la evolución agregada de la economía provincial, que por su periodicidad mensual permitirá llevar a cabo el análisis detallado del ciclo económico y sus fluctuaciones de corto plazo. Quien lo presentó fue el investigador Pedro Moncarz.
“La variable económica que provee mayor información es el nivel agregado de actividad económica, cuya medida más amplia y conocida es el Producto Bruto Interno (PBI). Un inconveniente con el PBI es que el mismo suele estar disponible con bastante rezago, lo cual requiere acudir a estadísticas alternativas”, justifica el estudio.
“Cuando se consideran niveles sub-nacionales, los problemas relacionados a la disponibilidad de estadísticas adecuadas y actualizadas cobran aún mayor relevancia, existiendo una gran heterogeneidad entre las diferentes provincias argentinas”, continúa. En función de lo anterior, se construyó el Índice Compuesto de Actividad Económica de Córdoba (ICCor), el cual busca reflejar la evolución agregada de la economía de la Provincia de Córdoba, y que dado su periodicidad mensual permite también llevar a cabo un análisis detallado del ciclo económico.
Nuevas tendencias en el empleo (con foco en la industria de Córdoba)
Otro de los estudios del observatorio se titula “Nuevas tendencias en el empleo: situación y desafíos en la Industria de Córdoba”. Este estudio, cuya fuente es una encuesta aplicada a 225 empresas industriales de la ciudad de Córdoba, procura aportar información local sobre fenómenos y tendencias en el empleo, que se vienen monitoreando globalmente en el contexto de pospandemia. El responsable fue el investigador Andrés Matta.
Algunos de los datos más salientes son estos:
- 71% de las empresas cordobesas identifican a los cambios tecnológicos (junto a los cambios en métodos y prácticas laborales) como uno de los cambios realizados o planificados más importantes en su organización desde el fin de la pandemia y casi la totalidad (91%) lo identifica como un cambio que tendrá impacto en el empleo. Si bien hasta el momento de la encuesta esto era más frecuente en firmas pequeñas y medianas/grandes, al indagar en relación al futuro inmediato abarca por igual a todas las industrias (especialmente a sectores como “tecnológicas”, o “metales y transporte”).
- Por su parte, un 62% ha incorporado tecnología específicamente a sus estrategias comerciales, o aumentado la venta online (destacándose aquí los rubros “textiles” y “alimentos y bebidas”).
- Un 63% de las industrias encuestadas tuvieron renuncias en el último año, un fenómeno que afectó especialmente a las empresas medianas/grandes (91%) y pequeñas (79%) más que a las microempresas (40%). Esto podría atribuirse a la dinámica habitual de la planta de personal, pero al ser consultadas explícitamente por las dificultades para retener al personal un 34% indica que en el último año tuvieron este problema e incluso un 22% lo ha considerado entre los tres principales cambios recientes en su sector -ratificándose que afecta en términos proporcionales mucho más a las empresas medianas/grandes (61%) que a las pequeñas (31%) y las microempresas (27%)-.
- 65% de las empresas consultadas ubican a la demanda de flexibilidad horaria y trabajo remoto por parte del personal como uno de los tres cambios más importantes en su sector.
- En esa línea, 46% de las firmas han buscado arreglos de trabajo flexibles en el último año y 39% han aumentado el trabajo remoto como solución a la dificultad para retener al personal o a las vacantes difíciles de cubrir. No obstante, los datos indican que esto podría ser un fenómeno acotado: estas estrategias, además de darse fundamentalmente de las firmas de mayor tamaño (solo alcanzaron al 10% de las microempresas) son algunas de las menos planificadas para los próximos doce meses.
La información producida por el Observatorio está disponible en este enlace.