La España vaciada y la España rellena, condenadas a entenderse

(Por Julián Briz Escribano, Universidad Politécnica de Madrid (UPM); Isabel de Felipe Boente, Universidad Politécnica de Madrid (UPM), and Teresa Briz, Universidad Politécnica de Madrid (UPM)) En 1994, la Plataforma por Cuenca publicó el Libro negro de la marginación de Cuenca, que mostraba con datos el estado de esta provincia tradicionalmente relegada del desarrollo económico. No es casualidad que se empleara ese término: la RAE define como marginados a personas o grupos no integrados en la sociedad.

Image description

No obstante, el adjetivo que ha ganado popularidad al hablar de la España rural es el de vaciada. Y si hay una España vaciada, también hay una España rellena, esta vez relacionada con el medio urbano. Estos entes no están divididos por líneas claras, sino por una transición en claroscuro, e intercambian continuamente flujos de población y culturales.

A pesar de coexistir en el mismo territorio, la ciudad y el campo no han sabido entenderse. Sin embargo, ciertos acontecimientos de los últimos años, como la pandemia y la guerra de Ucrania, dibujan un nuevo escenario para el mundo rurbano. ¿Se trata solo de una tormenta pasajera o de un cambio de ciclo que nos obliga replantear las políticas socioeconómicas y medioambientales?

España vaciada (y marginada)

El término vacío como referencia al mundo rural es una entelequia, pues en realidad no está deshabitado: permanece una población que sobrevive a múltiples problemas y, además, hay una flora y una fauna que están proliferando ante la retirada de las actividades humanas.

En nuestra opinión, los calificativos marginados y olvidados son más adecuados. En todo caso, hay que reconocer el impacto y la concienciación social cosechados desde 2016, con la publicación del libro España vacía del periodista Sergio del Molino, y especialmente desde marzo de 2019, cuando se utilizó el término vaciada en una manifestación en Madrid que reivindicaba la visibilidad de estas zonas.

La España vaciada incluye las áreas que experimentaron una fuerte emigración en las décadas de los 50 y 60 y que hoy comprenden el 90 % del territorio nacional. La despoblación rural, que lleva más de medio siglo, está provocando un desequilibrio territorial con efectos políticos y socioeconómicos.

La economía de mercado prima la globalización, quedando el sector agrario como eslabón proveedor, con menor valor añadido. La agroindustria, la biotecnología y la distribución, dentro de la propia cadena productiva, acaparan las mayores inversiones de capital innovador. La faceta competitiva y la liberalización comercial impulsan la mecanización que, unida a los monocultivos y las prácticas agrarias, amortizan puestos de trabajo expulsando a la población a otros yacimientos laborales, habitualmente urbanos.

El rechazo cultural es otra fuente de marginación. Tradicionalmente, los campesinos han ocupado en muchos países el estrato social más bajo, tanto económico como cultural. Con ello la ciudad ha tenido una posición de privilegio al albergar a las clases más elevadas, minusvalorando a la gente del campo. Por ello, los emigrantes rurales solían esforzarse por liberarse de esa imagen adoptando los valores urbanos y olvidando sus orígenes.

Tres ancianos de espaldas sentados en un banco en un pueblo.
El envejecimiento de la población condiciona los movimientos demográficos entre el mundo rural y las ciudades. Joserpizarro / Shutterstock

Los problemas de la España rellena

Actualmente, alrededor del 55 % de la población mundial vive en ciudades y las megaciudades están proliferando en todo el mundo, especialmente en los países en desarrollo.

El dinamismo cultural y socioeconómico de la urbe es un polo de atracción. Más allá de la natalidad, el número de habitantes de las ciudades aumenta a través de aluviones que llegan desde el mundo rural, inmigraciones exteriores legales, debido a guerras como el reciente caso de Ucrania, o ilegales en pateras huyendo de la pobreza, inseguridad e insalubridad.

Sin embargo, el modelo urbano actual no es sostenible por su fuerte dependencia energética, alimentaria y de materias primas. La isla de calor urbana, la contaminación aérea y acústica, el aislamiento social, el crimen y la violencia provocan enfermedades físicas y psíquicas e inseguridad.

Hay también bolsas de marginados que viven en la pobreza, condiciones de estrés, vandalismo. En la España rellena de aluvión, proliferan grupos marginados por religión, pobreza, cultura u orientación sexual.

Condenadas a entenderse

Se vislumbra un escenario rurbano, con una convergencia progresiva entre lo rural y lo urbano, que están condenados a entenderse pues ninguno de los dos es viable de forma aislada.

Bajo esta perspectiva de entendimiento hay varias cuestiones a analizar, como la velocidad de esta aproximación, el horizonte contemplado, los recursos disponibles y los cambios a realizar para conseguirlo.

Las crisis socioeconómicas y naturales propician el caldo de cultivo para acelerar las modificaciones. Así, el cambio climático, los incendios, las sequías y las olas de calor, entre otros factores, está propiciando la aceleración de medidas a tomar.

Por otra parte, la ciudad se encuentra en un proceso de naturación, es decir, incorporar la naturaleza en su entorno, lo que la aproxima a prácticas hasta ahora rurales, como es el caso de la agricultura urbana.

El campo debe organizar sus demandas de forma insistente y coherente, adaptándolas a la situación del momento, resaltando las ventajas de una convivencia con el mundo urbano. Y la ciudad debe utilizar su potencial socioeconómico para hermanarse y desarrollar proyectos y actividades que salven al mundo rural de su incierto futuro.

En síntesis, se trata de buscar un balance rurbano, estabilizando las salidas del campo y atrayendo urbanitas para descongestionar las ciudades. Estas son algunas de las medidas a adoptar para modificar los flujos migratorios campo-ciudad:

  • Crear polos de desarrollo en áreas rurales.

  • Estimular el teletrabajo, dotando a los pueblos de infraestructuras de comunicación y servicios básicos esenciales para una vida amigable y sostenible.

  • Orientar los flujos de inmigrantes, cuya intensidad irá en aumento, hacia el mundo rural.

  • Medidas políticas, con visión a largo plazo, que estimulen inversiones y asentamientos empresariales, compatibles con el medio ambiente, creando puestos de trabajo y actividades económicas y culturales

Julián Briz Escribano, Catedrático emérito, Universidad Politécnica de Madrid (UPM); Isabel de Felipe Boente, Profesora jubilada de Economía y Desarrollo, Universidad Politécnica de Madrid (UPM), and Teresa Briz, Profesora Contratada Doctora. Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica, Alimentaria y de Biosistemas, Universidad Politécnica de Madrid (UPM)

Este artículo fue publicado originalmente en The Conversation. Lea el original.

The Conversation

Tu opinión enriquece este artículo:

El cielo español se oscurece para las low cost

La Dirección General de Consumo está por despegar con sanciones para las aerolíneas de bajo coste. Más allá de las multas, lo que está en juego son las políticas que tanto nos afectan a los viajeros. Se avecinan cambios, ¡y no precisamente de vuelo!

Globant alcanza una facturación de más de 148 millones de dólares en España en 2023 (la multinacional creció más de un 70% en la región durante el ejercicio anterior)

Globant, compañía nativa digital centrada en reinventar negocios a través de soluciones tecnológicas innovadoras, ha anunciado una facturación de más de 148 millones de dólares en España durante el ejercicio relativo a 2023. Tras una fuerte apuesta por la expansión nacional, la multinacional consolida su posición en el país con un crecimiento de más de un 70% en tan solo un año.

Glovo lanza en España ‘Glovo Academy’, un programa de formación para PYMES en el sector hostelero

La tecnológica española Glovo y la red global de espacios de coworking Impact Hub lanzan en España ‘Glovo Academy’, un programa de formación en herramientas digitales para impulsar el crecimiento de PYMES en el sector hostelero. Glovo sigue reforzando así su compromiso con estos negocios y suma una iniciativa más a ‘Glovo Local’, una iniciativa pionera para apoyar a PYMES en la digitalización de su actividad. 

El 88,2% de los madrileños creen que es importante que el textil y el calzado tengan una segunda vida (pero el 46,5% cree que no tiene información suficiente sobre cómo reciclar)

Un estudio llevado a cabo por la agencia de investigación de mercado 40db e impulsado por la Asociación para la Gestión del Residuo Textil - formada por Decathlon, El Corte Inglés, H&M, IKEA, Inditex, KIABI, Mango, Sprinter y Tendam – analiza los hábitos de consumo de los madrileños y su interés en reutilizar la ropa y el calzado.

Éste sitio web usa cookies, si permanece aquí acepta su uso. Puede leer más sobre el uso de cookies en nuestra política de cookies.