“Belgrano tenía un sueño para el país, veía mucha pobreza especialmente en Buenos aires y consideraba que la gran transformación productiva era a través del cáñamo y el lino para la industria textil y no lo dejaron. Belgrano fue un visionario” fue una de las frases que utilizó Gerardo Morales para contextualizar la importancia de este proyecto de cannabis. Más allá de la sorpresa del auditorio frente a la cita, Cannava SE rindió sus primero números ante la ciudadanía, marcando el camino en el país con una producción que ya hace historia.
Con la nueva reglamentación de la ley de uso medicinal, Argentina se integra de a poco a la cada vez más globalizada reivindicación del uso del cannabis. Jujuy pica en punta con el proyecto que lleva más de 2 años en formación y ejecución.
Cannava construyó el primer laboratorio de piloto en el país de producción de derivados de cannabis con una capacidad de extracción de 2 kilos de flor por día.
En el laboratorio, se realizó la adaptación genética de las diferentes cepas de cannabis seleccionadas e importadas. Y se cosechó media tonelada de flores en una primera etapa, tanto con cultivo en campo como en invernadero. Siempre, bajo la supervisión del Instituto Nacional de Semilla INASE.
Los equipos profesionales y científicos de la empresa estatal ya iniciaron las operaciones que permiten la extracción de aceite y la formulación de los ingredientes farmacéuticos activos derivados de la planta. Hasta la fecha llevan procesados 61.4 kilógramos de flor que significan 7 litros de aceite crudo CBD (cannabidiol)
“Hace dos años fui a buscar y todos los laboratorios y posibles interesados en este proyecto, y no hubo gran interés. Hoy todos quieren en aceite de Jujuy y estimamos que en septiembre tendremos masividad en nuestra producción” resaltó y anticipó Morales.
Cannava tiene con su propia planta farmacéutica de 600 m2 e Finca El Pongo, dedicada pura y exclusivamente al procesamiento de cannabis para su transformación en aceite medicinal de grado farmacéutico y que todo el complejo biotecnológico cuenta con el aval de las guías de bunas prácticas de laboratorio para la fabricación de medicamentos y la norma ISO 17.025
En el marco de anuncios, el primer mandatario puso fecha para junio de este año, momento en el que estará operativa la planta farmacéutica más grande del país y Latinoamérica, capaz de procesar 45 kilos de biomasa vegetal por hora. Con un exhaustivo control de calidad, y certificación GMP europea. La inversión total $78 millones de pesos y su equipamiento que incluye: extractores de aceite grado farmacéuticos, evaporadoras, destiladores, chillers, maquinas de micro fluidización, y envasadoras u$d 1.1 millones de dólares.
Hoy Cannava cuenta con 15 hectáreas productivas y los equipos estiman una expansión de cultivo gradual. En Junio de este año, la superficie será de 35 hectáreas. En mayo 2022 superaría las 600 hectáreas. Y En un ambicioso proceso de crecimiento esperan para 2023 contar con una superficie productiva de 2000 hectáreas.
Con esta mega expectativa en mayo de este año se inicia la construcción de un establecimiento "post cosecha" que contará con la capacidad de procesamiento y acondicionamiento vegetal previo a su ingreso a laboratorio.
Hoy en Cannava trabajan 60 personas de los cuales 25 son trabajadores de campo. Con expectativas de crecimiento antes descripto, la empresa estatal sumará este año 50 trabajadores. En 2022 1800 trabajadores y en 2023 con las 2000 hectáreas sumaria entre 5000 y 7500 empleos.
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