El test rápido de Abbott Panbio™ COVID-19 Ag, reconocen desde la empresa, es un instrumento confiable y accesible. El objetivo es ayudar a los profesionales de salud a detectar infecciones de coronavirus a escala masiva.
¿15 minutos? El test obtiene resultados en un cuarto de hora, sin la necesidad de contar con instrumentos de laboratorio, utilizando la tecnología comprobada de flujo lateral.
Aprobados con el permiso de importación especial de ANMAT en Argentina, las pruebas de Abbott ofrecen información crítica en la etapa de la infección cuando el riesgo de contagio es más alto. Los tests de antígeno detectan una proteína del virus para determinar si la persona actualmente tiene la infección.
Los pro: su accesibilidad de precio ($ 400 cada uno) y portabilidad garantizan su uso a gran escala en cualquier lugar, sin la necesidad de dispositivos adicionales.
¿Se podrán conseguir en farmacias o solo estarán disponibles en clínicas, hospitales y laboratorios? “Estarán disponibles en clínicas, hospitales, laboratorios y para profesionales de la salud. Por el momento no estarán en farmacias”, sostiene Daniel Horán, gerente general del negocio de Diagnósticos en Abbott.
Expectativas de éxito
“En Argentina, tener la capacidad de llevar a cabo pruebas de COVID-19 a gran escala es importante para poder prevenir el avance del virus” agrega Horán.
También, desde la empresa, indican que los tests rápidos de antígeno pueden ayudar a:
- Incrementar el acceso a las pruebas por su diseño simple: son altamente portátiles, fáciles de usar y entregan resultados rápidos.
- Permitir testeos más frecuentes: Panbio Ag utiliza la tecnología comprobada de flujo lateral para ofrecer resultados que un profesional de la salud puede leer en 15 minutos.
- Mejorar la escala de testeos: apoyando a comunidades y organizaciones a realizar pruebas para ayudar a reducir el riesgo de propagación de la enfermedad, sumado a los testeos de PCR.