¿De qué se trata y cómo aplicar la TPA en el ámbito personal y laboral? Para profundizar dialogamos con la Lic. Silvina Lambertini, kinesióloga y autora del método y de una formación profesional específica.
Muchas personas, de edad indistinta, acuden a sesiones de kinesiología o rehabilitación cuando sienten algún tipo de dolor en el cuerpo o con una lesión ya diagnosticada. El problema está en que no siempre se puede revertir al 100%, pero sí puede ser prevenida gracias a distintas técnicas y herramientas posturales.
La Terapia Postural Activa (TPA) es un método implementado alrededor de los años 2000 en la ciudad de Córdoba de la mano de la Lic. Silvina Lambertini, kinesióloga y fisioterapeuta, que mientras cursaba sus estudios universitarios, algunas hernias discales se apoderaron de su columna. “Buscando herramientas para mejorarlas y sanar, di con la posturología como ciencia con una tendencia francesa; en ese momento ser terapista kinesióloga postural era algo desconocido en Argentina. Lo primero que observé es que no había educación postural. ¿Cómo voy a vender algo si la base no la tengo? Entonces, más que licenciada en rehabilitación, me transformé en educadora postural”, explica Silvina.
Con sesiones grupales y mucho foco en el individuo, la Lic. comenta que la gente comenzó a empoderarse de su condición fisiológica y accionar sobre su propia salud (sin intervenciones externas, quirúrgicas, electricidad, etc) para salir adelante, “tanto para prevenir lesiones como para trabajar si alguna había claudicado”.
La sede madre de esta terapia es en Vianett, un centro de entrenamiento en disciplinas gimnásticas terapéuticas, para la recuperación postural y el bienestar, ubicado en barrio Jardín. “Fue tanto el crecimiento y la demanda, que pedí la colaboración a colegas y ahí nació la idea de transmitirles mis conocimientos y brindarles herramientas. Registramos a TPA en el Registro de Marcas de Argentina, en el Código de Salud Educativa, adquirí un código ISBN y cerca del 2010 llevamos esta metodología hacia la Unión Europea. En la actualidad estamos llegando a distintos puntos de Europa y solicitando el registro en Estados Unidos”, cuenta la especialista.
La terapista profundiza en que esta metodología puede (y debería) estar dentro de las empresas como un método de prevención y no esperar que se reciban carpetas médicas prolongadas de sus empleados, sin saber cuándo retornarán a sus puestos laborales: “Muchas empresas ya lo aplican. Es una inversión, la persona no solamente previene posibles lesiones o malestares, también mejora su eficiencia y eficacia en el trabajo. Hoy, con los más de 600 diplomados que existen en TPA, brindamos la posibilidad de que sean ellos los que vayan y encuentren su oportunidad de trabajo en las empresas, participando activamente, pasa mucho en Paraguay, Uruguay y Chile, por ejemplo”.
Diplomatura en TPA
La formación de TPA está destinada a profesionales de la salud y movimiento, por ejemplo licenciatura en kinesiología y fisioterapia, kinesiología y fisiatría, profesorado de educación física, profesorado de yoga, profesiones que tienen un bagaje y conocimiento previo. Esta diplomatura es la unidad comercial y trabajan con equipos multidisciplinarios, equipo de coaching, proveeduría oficial (“kits TPA”, espaldares, elementos necesarios para que las salas puedan funcionar), están incluidas las herramientas de marketing digital, publicidad. Una vez finalizado entregan el certificado oficial y pueden comenzar a trabajar y ofrecer la terapia. “Generamos una competencia entre las salas que funciona de una forma muy cooperativa y orgánica”, comenta la kinesióloga.
El grupo 1 es para profesionales argentinos residentes, el precio final es de 850 dólares. El segundo grupo, latinoamericanos, 1.000 dólares.Y el tercer grupo, de otros países, 1.200 dólares. Por un lado contarán con la biblioteca audiovisual durante 12 meses consecutivos, para navegar a través de seis bloques diferentes y de forma asincrónica. Son tres días de cursado consecutivos de ocho horas diarias y luego lo práctico en sala. “Tenemos distintas sedes en las provincias donde nosotros damos esa fase presencial. Nos vamos moviendo según la región y en España, en Madrid y Barcelona. Además contamos con un mapa con las salas oficiales funcionando y los datos de los profesionales habilitados”, cuenta.
“En 2023 fueron 83 diplomados y en lo que va del 2024 son 110. Hay 300 salas de TPA funcionando en Argentina y en otros 5 países. Nosotros formamos profesionales para generar conciencia en la población, nuestro trabajo es de triple impacto en ese sentido. Trabajamos mucho en lo que es la responsabilidad social empresarial, todo lo que tiene que ver con el apoyo a la comunidad. Fuimos cambiando ese paradigma de la medicina tradicional y entender que somos movimiento, intercambio”, explica Ignacio, administrador general de Vianett y TPA.
Beneficios de TPA
Lo más importante, según opinan los profesionales, es el desestrés, un objetivo muy elevado como profesional. A través de esta práctica no solo se adquieren conocimientos posturales y se activa la postura, también se equilibra el estado de vigilia. “Cuando uno equilibra estos dos sistemas, el cuerpo deja de molestar, deja de doler, deja de avisar, se siente muy satisfecho para activarse. Trabajar con nuestro propio peso a favor y en contra de la gravedad hace que trabajemos con esos dos sistemas. La persona empieza a mejorar, los movimientos se vuelven mucho más flexibles, tiene más vitalidad y está emocionalmente más integrada. Viene bien para cualquier persona, sea la edad y sexo que fuere”, argumenta Silvina.
Los beneficios que pueden ser de gran impacto en la salud empresarial es que quienes trabajan para ella se encuentren integralmente saludables, ávidos, ágiles, lúcidos y enfocados. Una práctica de TPA lleva no más de 30 minutos, es vivencial, participativa y activa. Se logra respirar mejor, circular ese oxígeno con expansión, fijar la visión sin molestias, sentarse o moverse con posturas sostenidas adecuadas, tener reservas de energías, más motivación, despertar la creatividad y eficacia en sus momentos de producción.
“TPA logra en corto tiempo resultados saludables y sostenibles. Lo que nosotros oficiamos es la escuelita del movimiento”, finaliza Silvina.