Las llamadas “funciones distendidas” en cines son proyecciones cinematográficas que presentan una serie de adaptaciones (se suavizan los estímulos sonoros y lumínicos, hay libertad de movimiento en la sala, se ofrecen recursos informativos para la anticipación y se disponibiliza un área de “regulación sensorial”), que permiten que las personas neuro divergentes, como por ejemplo autistas y personas con hipersensibilidad sensorial, puedan tener una experiencia agradable del espectáculo.
El licenciado en Psicología (MN. 40967) Matías Cadaveira, especializado en neurodiversidad y asesor de Disney en funciones distendidas, explica que estas propuestas “permiten que personas con diferentes necesidades puedan disfrutar de una salida al cine sin la preocupación de que el entorno les resulte abrumador”. Se trata de una manera de garantizar el derecho de todas las personas a disfrutar de propuestas de entretenimiento.
Para muchas personas neuro divergentes, las funciones distendidas representan una posibilidad única de disfrutar de la magia del cine. Neki Tavosnanska, madre de dos hijos, uno de los cuales tiene autismo no verbal, cuenta que gracias a estos espectáculos adaptados, su hijo pudo ir al cine por primera vez. “Fue una experiencia hermosa, sobre todo por el hecho de no tener que estar sentado todo el tiempo”, y agrega que por eso se empezó a animar “a llevarlo a casi todas las funciones distendidas”.
Matías Cadaveira, licenciado en Psicología especializado en inclusión y asesor de Disney en funciones distendidas para personas neurodivergentes.
El experto Matías Cadaveira comparte 5 recomendaciones a tener en cuenta a la hora de asistir a una función de cine distendida con personas neurodivergentes:
1. Comunicación clara: hablar con la persona sobre qué esperar durante la función. Explicarle las adaptaciones que se hicieron y responder a sus preguntas.
2. Anticipación: compartir pictogramas y otros recursos visuales para anticiparle lo que va a venir. Eso ayudará a manejar emociones como la ansiedad.
3. Llevar objetos reconfortantes: permitir llevar objetos reconfortantes, como juguetes, squishies, mantas, auriculares con cancelación de ruido o anteojos, para que la persona pueda sentirse a gusto y cómoda.
4. Llegar temprano: puede ayudar a evitar aglomeraciones y a encontrar los asientos con tranquilidad.
5. Respetar sus necesidades: cada persona es única, por lo que es importante respetar sus requerimientos de apoyo antes, durante y después de la función.