Malas noticias, muchachos: parece que vamos a entrar en recesión
Resumiento, de los tres motores que tiene una economía, dos parecen parados (y hasta en reversa):
* La inversión (que nunca fue nuestro fuerte) va a sentir el parate del contexto global y los ruidos locales que el gobierno suma, todo en un año electoral. La inversión del sector público puede ser la excepción, pero hay que contarla cuando se efectiviza en obras y no en los anuncios a la prensa.
*Las exportaciones (que nos venían “salvando”) muestran un frenazo demoledor en enero: los ingresos públicos por exportaciones retrocedieron un 25% interanual. No es luz amarilla, es roja.
*El consumo interno (quizás la más “controlable” de este trío de variables) todavía se resiste al retroceso, pero le costará dar batalla en solitario, por más incentivos y fondos públicos que lo apuntalen.
Si tu empresa depende del mercado interno quizás el desafío sea remar el doble para terminar el 31 de diciembre en el mismo lugar.
Resumiento, de los tres motores que tiene una economía, dos parecen parados (y hasta en reversa):
* La inversión (que nunca fue nuestro fuerte) va a sentir el parate del contexto global y los ruidos locales que el gobierno suma, todo en un año electoral. La inversión del sector público puede ser la excepción, pero hay que contarla cuando se efectiviza en obras y no en los anuncios a la prensa.
*Las exportaciones (que nos venían “salvando”) muestran un frenazo demoledor en enero: los ingresos públicos por exportaciones retrocedieron un 25% interanual. No es luz amarilla, es roja.
*El consumo interno (quizás la más “controlable” de este trío de variables) todavía se resiste al retroceso, pero le costará dar batalla en solitario, por más incentivos y fondos públicos que lo apuntalen.
Si tu empresa depende del mercado interno quizás el desafío sea remar el doble para terminar el 31 de diciembre en el mismo lugar.