La estrategia de Logros, la marca de la carne made in Córdoba, para crecer en un mercado que recupera el terreno perdido

Su padre, Juan Carlos Grimaldi, fue un referente de esta industria en Córdoba. Fue uno de los fundadores de Estancias del Sur, firma que se vendió en el 2001 al Grupo Socma y que luego pasó a manos extranjeras, que decidieron su cierre varios años más tarde.

Tras aquella venta, Grimaldi abrió en el 2003 el Frigorífico Río Segundo S.A., sociedad que presidió hasta su fallecimiento, el año pasado.

Hoy la empresa es comandada por Mariano Grimaldi -socio junto a sus dos hermanas, María Sol y María Celeste- quien asegura que la industria está en un proceso lento de recuperación, pero con grandes perspectivas para el mediano plazo.

“Todo esto -dice, mientras señala con una mano la planta que la firma tiene en la localidad de Río Segundo- comenzó cuando mi padre decidió comprar la quiebra del frigorífico El Duraznillo, hace casi 15 años. En apenas 6 meses -y con más de 500 albañiles y contratistas trabajando al mismo tiempo - se levantó la obra en un predio que estaba abandonado. Empezamos a trabajar y nunca hemos parado”, relata al inicio de la charla.

Al poco tiempo los Grimaldi concursaron para la Cuota Hilton -el cupo de cortes de carne que compra la Unión Europea- y se convirtieron en un referente de los exportadores del sector.

Hoy son los únicos que comercializan al extranjero. En la provincia quedan dos de los cinco frigoríficos que había habilitados para tal fin hace 20 años: “Uno es Logros, que es de Ciclo 1, es decir que está habilitado para faenar y procesar carne y otro de Ciclo 2, Vare S.A., que recibe solo carne faenada”. Ambos son marcas con las que opera la sociedad familiar.

Actualmente exporta a la Unión Europea con Logros, para el mercado regional -principalmente Chile y Brasil, con la marca Pampa -y a China “donde también usamos Logros pero allí nos identifican con el número de establecimiento: la 4069”, dice.

Sostiene que el país está muy lejos del nivel pleno de exportación, que implicaría vender afuera el 80% de la producción. En la actualidad este año con suerte se llegará al comercializar en el extranjero el 10%.

“De la salida del anterior gobierno, donde la exportación estaba muy tranquila, por decirlo de alguna manera, estamos recuperandonos de a poco. Acá se produjo un cambio grande, fue el día y la noche, donde antes se cobraba arancel para exportar y hoy se incentiva la venta a esos mercados vía reintegros”, comenta.

Los números de Logros lo demuestran: en junio de 2016 lograron vender afuera 467 toneladas y el mes pasado llegaron a 574 tn. Casi un 25% más.

Grimaldi dice que si bien hoy se cumple con apenas el 70% de las 29.000 toneladas que tiene asignada el país por Cuota Hilton, de mantenerse el mercado en los próximos 5 años se lograría cumplir con el cupo. “No hay novillos de exportación porque en los últimos años el mercado interno demandaba más y se encargaron de hacer animales menos pesados y de a poco eso está cambiando”, vaticina.

La firma, obviamente, también abastece al consumo interno y es el frigorífico cordobés que más produce para el mercado local. Hoy la firma faena 13.000 cabezas al mes, que significan un crecimiento anual en torno al 5%.

En sus plantas trabajan casi 500 empleados directos y este año planea facturar más de $ 1.200 millones. Además, integra la Cámara de Consorcios de Exportadores de Carne, donde están las 10 principales empresas del país.

Un cambio en la cadena
La posibilidad de mejorar las ventas externas implican también una mayor eficiencia en toda la cadena. “Hoy existe una gran asistencia del Senasa asesorando y asistiendo al productor para que tenga su rodeo trazado para la Cuota Hilton, ya que los animales destinados a la exportación se producen en campos inscriptos para la UE. También hubo un gran cambio en ese sentido”, reconoce

La frazada corta
Los incentivos para exportar cambiaron el foco de la industria y de Logros que apuntaron sus cañones a mercados que pagan precios más altos por el producto. Pero eso no implicó grandes saltos en la rentabilidad, sostiene.

“Para nosotros el salto de los costos internos es todo un tema: el año pasado cerramos paritarias con suba del 43% y este año del 25% pero el impacto fuerte fue en las tarifas de servicios públicos: de $ 500.000 de luz pasamos a $ 1,5 millones y en gas pagábamos $ 80.000 y ahora $ 350.000, esos aumentos no los hemos trasladados a precios porque sino quedamos fuera de mercado”, reconoce.

En ese sentido, asegura que hoy la carne “es lo más barato que hay en la mesa familiar” porque con un kilo de milanesas come una familia al mediodía y a la noche. “Somos proveedores de cadenas de supermercados locales (Almacor, Buenos Días) que comercializan el kilo de pulpa a 90 o 100 pesos. Si ha eso lo hacés milanesa tenés dos comidas diarias para 4 personas. Hay proteínas más baratas ¿pero cuánto te rinde un pollo de $ 40 el kilo?”, dice defendiendo su negocio.

Hoy la torta de consumo de proteína animal es de 120 kilos per cápita al año. La carne vacuna llegó a ocupar casi 100 kilos pero al achicarse la producción de estos animales en el remplazo por la agricultura y al mismo tiempo mejorar las condiciones de producción de sustitutos (pollo y cerdo) cayó bruscamente en las últimas décadas. Hoy está en 57 kilos y para Grimaldi se mantendrá en esa zona.

Una empresa que se diversifica y que al mismo tiempo se integra
Además de las marcas que operan bajo el paraguas de Frigoríficos Río Segundo S.A., los Grimaldi poseen otros emprendimientos de mayor o menor tamaño que permiten complementar la producción. Son los siguientes:

• Un feedlot en la localidad de Río Primero que aporta entre un 20 y 30% para la faena en la planta industrial.
• Una empresa de producción agrícola, en la zona este de la provincia, que trabaja una importante cantidad de hectáreas.
• Campos de cría en Santiago del Estero, con casi 3.000 madres. Es la zona donde “hacen” los novillos de exportación.
• Planta de producción de proteínas -con la marca Logros- que se provee de harinas de carne, grasas y cebos que obtienen en el faenamiento.
• Son los principales inversionistas del Amerian Apart Hotel en Villa Carlos Paz.

Muchos proyectos (pero que dependen de las elecciones)
Grimaldi asegura que tiene en carpeta planes por varios millones pero que la empresa está esperando “ver qué pasa en el país” porque “no se decidirá ninguna inversión o ampliación hasta después de las elecciones, cuando tengamos mayor previsibilidad”, afirma.

“No me preocupa quien gane o pierda, lo que me preocupa es que todo el mundo está viendo qué pasa hasta octubre. Eso me parece una locura, no es serio ni sensato que esté todo parado cada vez que se vote. Debería ser todo junto”, opina.

Un ozonizador para toda la planta, una usina de biogás y el impulso a diversificación ganadera, como la reproducción de búfalos, son algunos sobre los que se avanza. Mirá en la nota “Seremos el primer frigorífico que certifique ‘bacteria cero’” de qué se trata cada uno de ellos.