El viernes, Jorge Sappia dejará la presidencia de la Convención Nacional de la UCR y probablemente el radicalismo de Córdoba se quede sin representantes en la Mesa Ejecutiva, al menos de acuerdo con las últimas noticias de las negociaciones partidarias. En un contexto que sería pacífico, se da por descontado que el nuevo presidente será Gastón Manes, el hermano de Facundo Manes.
La Mesa Ejecutiva de la Convención Nacional está compuesta por siete miembros. A un día de la reunión que se hará en La Plata (24 horas es una eternidad para la rosca radical), resulta que el oficialismo partidario, que en esta ocasión representan la dupla Gerardo Morales-Facundo Manes, como tiene la mayoría de los convencionales, obtendría cuatro sillas en la Mesa Ejecutiva. El grupo Evolución, que capitanea Martín Lousteau, se quedaría con dos. Y el séptimo integrante sería acordado entre Evolución y el radicalismo mendocino.
Si bien hay pocos nombres propios asegurados, hasta ahora ningún radical de Córdoba ocuparía un lugar en la conducción de ese organismo partidario, que es clave porque allí se votan los acuerdos electorales, las plataformas, y, eventualmente, hasta pueden designarse los candidatos. Si al final así quedan las cosas, en los cuerpos partidarios nacionales el lugar de mayor privilegio sería para Ramón Mestre, actual secretario de Coordinación del Comité Nacional.
Córdoba tiene 21 convencionales (uno por cada diputado y senador nacional) que fueron elegidos en 2018, con una relación de fuerzas establecida en el lejanísimo 2016. Los convencionales de la UCR cordobesa no tendrían que someterse a ningún desgaste porque el acuerdo nacional se los evitará. Mejor que para ellos es para los referentes partidarios, a los que nada bien les haría un nuevo roce público, cuando al menos públicamente tratan de minimizar las diferencias para amplificar las posibilidades de victoria en el 2023 (en bambalinas, claro, los tironeos persisten entre la dupla Mario Negri-Ramón Mestre versus Rodrigo de Loredo).
La Convención Nacional de mañana en La Plata es una ocasión para exhibir unidad partidaria, cuando la pulseada con el PRO, el principal aliado en Juntos por el Cambio, va haciéndose cada vez más evidente.
De todas maneras, la Convención habrá de “ratificar la vocación y voluntad política de la Unión Cívica Radical de fortalecer la coalición opositora amplia al oficialismo nacional, basada en acuerdos programáticos y en denominadores y valores comunes”.
Está previsto que al teatro Coliseo Podestá concurran unos trescientos convencionales de todo el país. Antes de designar a las autoridades, pronunciarán sendos discursos los presidentes de los bloques parlamentarios oficiales de la UCR: Mario Negri, de Diputados, y Luis Naidenoff, del Senado.
También expondría el mendocino Alfredo Cornejo, titular del interbloque de Juntos por el Cambio en el Senado, y el acto se cerraría con el discurso de Morales y otro del nuevo presidente de la Convención, Gastón Manes.
Sappia
En declaraciones al portal de noticias Letra P, el presidente saliente, Jorge Sappia, dijo que “el partido está replanteando su actitud, con vocación de protagonismo y de recuperar un lugar que había perdido”. “Por lo que he hablado con Manes, es un hombre bien ubicado en la perspectiva del partido. Hemos coincidido en todo, en líneas generales”, agregó.
Respecto a sus constantes cuestionamientos a Cambiemos, Sappia sostuvo que “lo que he criticado es que nos aliamos con un partido como el PRO, que es totalmente distinto a nosotros en términos ideológicos, sin haber hecho por lo menos un acuerdo programático sobre hacia dónde ir y cómo hacerlo”.