El absurdo criterio de escupir hacia arriba.
Cuando lo escuché ayer en Mitre 810 no lo podía creer: “damnificados” del programa Hogar Clase Media adelantaban orgullosos que van a hacer todo lo posible por entorpecer el desarrollo de la Copa Davis como forma de hacer oir sus protestas. Pensé: ¿qué nos está pasando como sociedad que en pos de mis supuestos derechos me siento en el derecho -y hasta con orgullo lo digo- de intentar boicotear, afear y complicar un evento internacional que nos pondrá en la vidriera mundial? ¿Qué se podrá ganar con eso? ¿Es que hemos perdido la conciencia colectiva de evitar acciones que -en última instancia y más tarde o más temprano- sólo nos van a perjudicar? Me enojé al principio y pensé en llamarlos al boicot del boicot, es decir, a que seamos nosotros los que impidamos que estos pocos cordobeses entorpezcan algo que -más allá de cualquier consideración y mezquindad política o empresaria- es un hecho histórico para la ciudad. Pensé en hacer eso, pero no. En cambio les pido que con altura y sin agravios me ayuden a enteder esto... quizás sea yo el equivocado... Gracias (opiniones en Comentar)
Tu opinión enriquece este artículo: