Ir a la universidad sí sirve (y es indispensable para aumentar la empleabilidad)

(Por Martín Poncio) Me atrae mucho pensar en diferentes opciones y analizar distintas miradas, incluso desafiando lo obvio.  Hace un tiempo realicé un trabajo que mostraba que no hay relación directa entre lo que uno estudia y el sector en el que termina siendo exitoso (con la salvedad de algunas carreras como Medicina y Abogacía, claro).  En este mismo trabajo el 90% de los consultados fueron a la Universidad.

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Esta relación nada tiene que ver con lo bueno o malo de estudiar: lo más importante que muestra es que las personas que llegaron si a posiciones de éxito en diferentes empresas de Córdoba fueron preparadas en su mayoría en la universidad (90%) y el 10% restante fueron empresarios independientes que fundaron su empresa o son la segunda o tercera generación familiar. Entre nosotros y en confianza y si me permiten … o estudiás o heredás…
Es decir que ir a la Universidad sirve y mucho. Podríamos pensar en decenas de ejemplos para mostrar lo absoluto de esta definición; incluso en el sector de la tecnología existen acuerdos con todas las universidades; para aspirar a mandos medios como jefaturas o incluso gerencias,  ser universitario es la base, y generalmente se piden ciertas especializaciones y maestrías. 
Pero ya habiendo dicho que la universidad es un factor determinante en el desarrollo de toda sociedad, podemos sumar también que por otro lado existe una profunda escasez de talento  en todo el mundo. Ante esa falta de gente talentosa dentro de la propia industria, es natural que las empresas comiencen a buscar talentos en otros segmentos  y con otras características. Ahí aparecen idóneos que son muy buenos en lo que hacen, pero no necesariamente tienen todas las competencias y habilidades necesarias.

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