¿La actividad económica tocó su techo? Una serie de factores estructurales limitan la generación de dólares y el crecimiento, luego del estancamiento en la actividad percibido en las estadísticas oficiales desde septiembre.
A la restricción externa (la falta crónica de divisas y de sectores que generen divisas) se suma un condicionante adicional, postuló la consultora Analytica: la creación neta de empresas que aumenten el empleo registrado y la posibilidad de exportar bienes y servicios nunca se recuperó de la fuerte caída que comenzó en 2018 y se profundizó con la pandemia.
El reporte postula que tres vectores limitan el crecimiento de la actividad. El más obvio es la escasez de dólares para producir, "en un contexto de fuertes compromisos asumidos con el FMI". La obligación de acumular reservas condiciona la gestión de las importaciones. A eso se suma el estancamiento exportador del país, en comparación con países de la región. Y, por último, "la innovación", condicionada por la cantidad de empresas operativas y generadoras de empleo registrado.
FALTAN EMPRESAS
"Se necesitan sectores industriales y de servicios cuya producción sea competitiva a nivel internacional. Para eso, hacen falta más empresas", dictaminó Analytica. Los datos oficiales muestran que la cantidad de empresas que generan trabajo registrado se mantuvo relativamente estable en torno a las 580.000 entre 2012 y 2017 inclusive. A partir de 2018, con el inicio de la corrida cambiaria que signó la suerte del gobierno de Mauricio Macri, el número empezó a caer y a fines de 2019 había unas 550.000. Con la pandemia, la debacle se profundizó y hubo un piso de 530.000 en el segundo trimestre de 2020.
Desde entonces, la remontada fue módica. Hacia el tercer trimestre de 2022, la cantidad de firmas privadas que generan empleo formal era inferior a 540.000. "El nivel alcanzado en septiembre de 2022 (último dato disponible) es similar al del segundo trimestre de 2008, catorce años atrás", afirmó Analytica.
"La ausencia de creación de empleo coincide con la caída tendencial del número de empresas per cápita y con el estancamiento del PBI con habitante", agregó. "El último registro positivo de creación neta de empleo por empresas nuevas coincide con el máximo del Estimador Mensual de Actividad (EMAE), del tercer trimestre de 2017", concluyó.
DÓLARES PARA RESERVAS O PARA PRODUCIR
Ricardo Delgado, CEO de Analytica, le agrega complejidad al análisis, porque tener reservas en el Banco Central es clave para la calma cambiaria que necesitan las empresas para crecer y generar trabajo: "La restricción externa es central. El único sector que aporta dólares es el agro, más puntualmente el complejo sojero. El resto de los sectores, incluso el turismo, demanda dólares. Si se logra que más sectores sean oferentes netos de divisas, se estará en mejores condiciones; ahora se confía mucho en el derrame", dijo.
"Tener dólares en el Banco Central es precondición necesaria y absoluta para estabilizar y tener una macro más ordenada; ahora, el camino para crear empleo es otro y tiene que ver con la innovación, con darle al sector privado oportunidades para crear empresas", añadió.
El plan Argentina 2030 del Gobierno apuesta a que sectores estratégicos (petróleo y gas no convencional, minería, el agro, la economía del Conocimiento) dinamicen el crecimiento y la generación de divisas.
Con la cantidad de empresas exportadoras estancada en torno a las 9000, se sostiene que Vaca Muerta y la minería requieren de grandes inversiones que asumirán empresas grandes. Se asume que ellas aliviarían la restricción externa y generarían pymes proveedoras y creadoras de empleo.
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