Más de 35 empresas ya forman parte del Movimiento antipiquete que impulsó Verónica Razzini

Verónica Razzini es rosarina, y junto a su familia (padre y hermanos) conforman Grupo Razzini, el cual está compuesto por empresas del rubro de la construcción: una planta hormigonera, un corralón de materiales de construcción y una planta recicladora de áridos. Verónica es contadora pública, y según cuenta, siempre se dedicó a la parte de administración y finanzas de las empresas del Grupo. Pero hace tres años descubrió que le apasionaban los recursos humanos, por lo que decidió abocarse a esta área. 

“Un día llegamos a trabajar a las empresas y en dos de ellas nos encontramos con que teníamos manifestaciones. Los empleados de planta habían salido a las puertas de las empresas decidiendo no hablar más con nosotros, con todo un despliegue del Sindicato de Camioneros en los ingresos, con colectivos, carpas y gazebos”, comienza relatando Verónica la experiencia vivida en 2020. Luego continúa: “Tratamos de buscar a alguien con quien hablar, para obtener más información sobre cuál era la demanda que tenían. Nos decían simplemente que nos teníamos que acercar al Sindicato para negociar”. Pero luego se enteran del motivo del bloqueo: exigían que 20 de los 80 empleados se afiliaran al Sindicato de Camioneros de Santa Fe.

Desde las empresas afectadas acudieron al Ministerio de Trabajo para explicar la situación que estaban viviendo, y allí les ofrecen una audiencia para el día siguiente, pero el Sindicato no se presenta. Pasada una semana, la familia Razzini empieza a constatar mediante escribanos que no los estaban dejando trabajar, ya que les impedían el ingreso a las empresas a clientes y proveedores. Sobre el procedimiento que llevaron a cabo, Verónica relata: “Así empezó, y con el paso de los días se comenzó a poner más violento. Nosotros no cedimos, y presentamos una denuncia penal con pruebas de lo que estaba sucediendo. La denuncia fue aceptada por la fiscalía y comenzó la investigación”.

Verónica cuenta que el equipo (compuesto por miembros del Grupo) todos los días se reunía y armaba estrategias, con la asesoría de un grupo de abogados, pensando siempre en sus valores y en su convicción: "No íbamos a permitir que nos arranquen la empresa. Nosotros siempre sentimos que ceder ante esta extorsión era entregar las llaves de nuestra empresa a personas que iban a entrar acá a decidir por nosotros. Los abogados nos plantearon que teníamos que entender que nos íbamos a pelear contra un sistema, no nos íbamos a pelear contra un Sindicato".

Después de muchos momentos de tensión y de recibir amenazas, un día un fiscal corrobora los bloqueos y decide llevarse a los trabajadores y a los delegados de los Sindicatos detenidos, librando una restricción perimetral. A causa de esa situación Grupo Razzini pudo despedir con causa a los empleados involucrados en el piquete, quienes fueron a la justicia a pedir la restitución de los puestos de trabajo, “y en un fallo inédito en el país la jueza laboral denegó las cautelares de restitución y ratificó que los despidos estaban correctamente hechos. Luego la justicia penal imputó a los delegados del Sindicato de Camioneros y a los empleados, otra situación inédita en el país”, relata Verónica.

Cómo nace el Movimiento Empresarial Anti Bloqueo

En marzo de este año, cuando se conoce la noticia de que se habían imputado a los delegados del Sindicato de Camioneros y a los empleados involucrados, Verónica comenzó a recibir una gran cantidad de llamados de empresarios de todo el país, y junto con Bernardo Fernández -empresario que vivió este año una situación muy similar con el Sindicato en Parque Ader-, decidieron crear un movimiento antipiquete.

A raíz del conflicto Verónica también conoce a Florencia Arietto, abogada penalista, especialista en estas cuestiones sindicales, con quien coincidió en que había que salir a dar el mensaje de que este tipo de situaciones no eran fáciles, pero que se puede trabajar en armar un método y protocolos para ayudar a los empresarios en estas situaciones. "Queremos ser parte de la solución a un problema, y no seguir siendo funcional al problema", es la convicción de Verónica. 

Con este Movimiento buscan difundir y apoyar a las empresas que tienen que enfrentar a las mafias sindicales, las cuales vienen extorsionando desde hace muchos años a los empresarios, quienes terminan cediendo para poder seguir trabajando.

“Generamos este movimiento para dar este mensaje de compromiso a los empresarios. Creo que fuimos todos muy pasivos durante mucho tiempo, cedimos un montón y creo que llegó el momento donde tenemos que decir ‘basta’. No podemos seguir cediendo ante estas situaciones", expresa la empresaria propulsora. 

Si bien el Movimiento Empresarial Anti Bloqueo se encuentra constituyéndose actualmente, más de 35 empresas de todo el país ya lo conforman, y muchas otras muestran su interés por sumarse, ya que tienen situaciones latentes, están amenazados, y quieren prepararse ante un posible bloqueo, según cuenta Verónica. 

Y a pesar de su poco tiempo de gestación, el Movimiento ya cuenta con dos casos de éxitos de empresas que tuvieron conflictos por bloqueos, y que se han podido resolver en poco tiempo gracias a las metodologías aplicadas y al asesoramiento del MEAB.

"Cada vez logramos que los bloqueos se desactiven más rápido, y hay casos en los que logramos que ni siquiera lleguen a bloquear, porque aplicamos las denuncias. El objetivo es que si todos homologamos una conducta como empresarios, ellos no van a poder seguir avanzando de esta manera", plantea Razzini.

Quienes conforman el Movimiento además están trabajando en armar un mapa de situación con el fin de ir analizando cómo se mueven los Sindicatos en cada localidad, y en cada provincia, cómo se mueven los fiscales y jueces, y cómo actúan los ministerios.

Verónica finaliza la entrevista del IAE reflexionando: “Yo creo que llegó el momento donde tenemos que comprometernos con nuestros valores, creo que eso es fundamental. Si hay algo que tengo como misión es inspirar a los empresarios a que dejen de tener miedo, nosotros somos los dueños de nuestras empresas, tenemos que tener el valor de defenderla, no podemos seguir permitiendo que pase esto. Creo que si nos unimos y homologamos conductas en todos los lugares vamos a poder desactivar esta situación. Estoy completamente convencida de que eso puede suceder".