Similitudes y diferencias del caso Jaime y del caso Mestre (¿pueden destituir al intendente?)

El viaje que Mestre, Cossar y Ostanelli hicieron a Corrientes invitados por la contratista ERSA sacudió la escena política local. Penalistas dicen que hay diferencias entre ambos hechos, aunque admiten que hay una evidente falta de ética. Para la oposición hay una violación a la Carta Orgánica que abre las puertas al juicio político contra el intendente y su vice.

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El Cesna 560 Citation en el que Mestre, Cossar, Ostanelli y sus esposas viajaron a la fiesta de ERSA.

El viceintendente Marcelo Cossar admitió en el programa ADN (Canal 10) que viajó en noviembre pasado junto al intendente Ramón Javier Mestre y el secretario privado de éste, Juan Pablo Ostanelli, a Corrientes para celebrar los 50 años de la empresa ERSA, contratista municipal a cargo de un cuarto del transporte público y de la mitad del servicio de recolección de basura en la ciudad.

En ese programa, el propio Cossar aseguró que no había similitudes con el caso del exsecretario de Transporte de la Nación, Ricardo Jaime, procesado por recibir dádivas.

Periodista: ¿(El avión) lo puso ERSA?
Viceintendente: La verdad, es que le puedo garantizar que ni la Municipalidad, ni el Concejo Deliberante ni Marcelo Cossar lo hizo.
P: ¿Viajaron gratis?
V: Sí.
P: ¿Y no tiene que ver con la (falta de) ética ese hecho?
V: Es antiético cuando un proveedor le alquila casa, le pone un yate, le paga las vacaciones.
P: ¿(Ersa) le pagó el alquiler de un avión? ¿Cuál es la diferencia?
V: Que nosotros fuimos invitados a una fiesta de 50 años de un proveedor.Entiendo que el viaje que hicimos no roza la (falta de) ética.


Para el penalista Facundo Pérez Lloveras el caso de Jaime “es un claro lado de dádivas en provecho personal” (NdR: una contratista le pagaba el alquiler y contrató avión para que viajara de vacaciones él y su familia a Brasil) mientras que en el de Mestre y sus amigos “un proveedor del Municipio lo invita a una fiesta y ellos van representando al municipio”.

Sin embargo, reconoció que es “muy discutible” que hayan viajado a Corrientes con sus esposas si se trató de un viaje “más institucional” y reconoció que puede haber una falta de ética pero aseguró que ello no “es delictual”.

Pero para el concejal Esteban Dómina (FC) si se comprueba que ERSA pagó el viaje se puede pedir el juicio político del intendente y el vice de la ciudad.

“Si se comprueba el pago de la contratista hay una violación a la Carta Orgánica Municipal y una denuncia en el Concejo abriría las puertas a un juicio político contra las máximas autoridades municipales en base a lo que contempla la Carta sobre Responsabilidad Política”, explicó a InfoNegocios.

Por su parte, Olga Riutort (bloque Eva Duarte) sostuvo que es clara la violación al principio ético de todo funcionario público pero que la posibilidad de un juicio político dependerá de lo que compruebe la justicia. “Si el juez determina que hubo prebenda obvio que iremos con los tapones de punta”, anticipó.

El tiempo de la investigación judicial comenzó a correr luego de que ayer el senador Luis Juez presentara una denuncia en la justicia federal por la recepción de prebendas.

Ayer a la tarde, José Manuel de la Sota se refirió a este tema. "¿Le preocupa la denuncia contra Mestre?", le preguntó un periodista. "No opino, tengo la mejor relación con el intendente, lo que le deseo es que tenga el mayor éxito así a la ciudad también le va bien", dijo el gobernador de Córdoba.

 

Tu opinión enriquece este artículo:

Del caso Jaime al caso Mestre y otras dádivas (periodistas incluidos)

Héctor Gonio Ferrari: “Amigo Íñigo: todo este circo mediático, politizado y descalificador no deja de ser un enorme acto de hipocresía. Si es por condicionantes éticos también los periodistas merecemos un cuestionamiento severo porque no me digan que recibiendo publicidad oficial están vacunados contra la autocensura. O por los regalos de fin de año o del 7 de junio, Día del Periodista, o en cualquier conferencia de prensa o presentación de productos. Es distinto el caso de Mestre y Cia. porque los invita una empresa a la que deben controlar, pero recordemos que los periodistas abrazamos la costumbre de controlar a todos, sean estatales o privados. Bueno sería conocer los cientos de casos de dádivas que los funcionarios -y los periodistas- reciben sin que nadie se entere. El hecho de hacerlo público, no deja de ser un acto casi de sinceridad. Y en nuestro país, muchas veces el sincericidio es una saludable actitud que te trae más problemas que satisfacciones”.

¿No existe una gran diferencia entre funcionarios públicos y periodistas de medios privados? Opiniones aquí.

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