La gestión de los recursos humanos es una materia en constante evolución. Las empresas y organizaciones que quieran mantener a sus colaboradores deben adaptarse a las nuevas demandas y a contextos cambiantes que van marcando el pulso de lo que viene. En este marco, la consultora cordobesa Gestal (especializada en selección IT y en Employee Experience), elaboró una lista con seis tendencias principales de recursos humanos para 2023.
“En términos del mercado laboral vigente ‘el bolsillo no lo es todo’. Aunque sin lugar a dudas el económico es un factor relevante, cientos de estudios realizados a nivel global indican que el salario no es el principal motivo por el cual las personas eligen o dejan un empleo. Factores como el clima laboral, los valores de la cultura y la flexibilidad componen al ‘salario emocional’ que cobra cada vez más relevancia para las personas”, destaca Marlene Pruvost, responsable de Operaciones de Gestal.
Aquí están, estas son las tendencias (una a una)
1) Foco en la experiencia del colaborador: escuchar a los colaboradores, sus inquietudes, expectativas y opiniones, se ha convertido en una necesidad imperiosa en un mercado tan competitivo y dinámico. Las tradicionales encuestas de clima implementadas una vez al año, ¡no van más!
El Employee Experience o Experiencia del Colaborador es un modelo de gestión que pone a las personas en el centro de la organización. En países como España, México y el resto de LatAm es una tendencia que ya se está implementando.
Consiste en aplicar herramientas que permitan tomar decisiones de gestión humana que estén basadas en datos concretos (no en intuición). Para ello, la aplicación de encuestas de pulso (es decir, breves y frecuentes) y la creación de indicadores que midan la experiencia son fundamentales.
2) Trabajo por objetivos, no por horas: las organizaciones más ágiles vienen utilizando un esquema de productividad basado en objetivos y no en horas de trabajo cumplidas. Esto fomenta mayor autogestión y responsabilidad de las personas por su trabajo, además de que construye una cultura laboral que se basa en la confianza entre las partes. El micromanagement y las culturas controladoras tienen los días contados. Esos modelos son vistos como disfuncionales y poco atractivos para la mayoría de los trabajadores.
3) El trabajo remoto seguirá creciendo: la tendencia indica que las vacantes presenciales e incluso las que plantean un esquema híbrido son cada vez más difíciles de ocupar. Sin embargo, en Córdoba aún hay resistencia y las organizaciones tradicionales apuestan por el regreso a la oficina.
Hoy en día, más del 70% de las personas que trabajan de forma remota tienen menos de 35 años de edad. Las nuevas generaciones están ingresando al mercado laboral sin haber pisado una oficina antes. Con esta realidad, aparecen nuevas posiciones que se encargan de gestionar la experiencia de colaboradores que trabajan en “oficinas” remotas a lo largo y ancho de un país, e incluso el mundo.
4) Flexibilidad en aumento: de la mano con las tendencias anteriores, encontramos el crecimiento de la flexibilidad en los entornos laborales. Cada vez más, los colaboradores esperan gestionar su propia jornada de trabajo, las decisiones sobre cuándo tomar sus vacaciones, realizar un trámite personal durante el horario laboral o decidir si quiero o no ir a la oficina hoy. ¿Y si quiero trabajar desde otra provincia durante una semana? No parece haber inconveniente.
Lo que se busca a fin de cuentas es un cierto equilibrio entre la vida personal y la vida laboral. Esto es posible gracias no sólo a la cultura de confianza y autogestión de los colaboradores, sino también a la implementación de sistemas eficientes que no requieran estar en un lugar físico para funcionar. El desafío de las organizaciones está en adaptar sus marcos regulatorios y políticas, para que sean lo suficientemente flexibles y abiertas ante estas posibilidades.
5) Bienestar en el trabajo: estudios indican que al menos el 70% de las personas experimentan sensaciones de estrés y ansiedad vinculadas a su trabajo. La tendencia de las organizaciones que toman cartas en el asunto para ocuparse del bienestar integral de sus colaboradores se ha consolidado fuertemente desde la llegada de la pandemia. Las proyecciones indican que durante 2023 se seguirá expandiendo, teniendo en cuenta no sólo el bienestar físico sino también el mental.
En Córdoba ya hay empresas que a lo largo del año organizan jornadas de trekking, talleres de mindfulness o competencias deportivas para que participen sus colaboradores. Estos espacios fomentan el bienestar físico, la relajación y descarga de tensiones, así como también permiten encuentros de socialización fuera del entorno habitual entre compañeros. ¡Excelente elección si lo que buscamos es el bienestar integral de las personas!
6) El trabajo con propósito: las personas tienen sistemas de valores y cada vez más esperan sentirse alineados con los valores que se fomentan y viven dentro de la organización en que trabajan. La coherencia entre los valores recitados y los que se reflejan en la cotidianeidad es fundamental. El deseo de sentirse alineado con los valores de la compañía es uno de los principales factores que alimentan la intención de quedarse.
Las personas esperan sentirse representadas por los líderes de sus organizaciones respecto a los temas que consideran importantes a nivel personal (por ejemplo salud, medio ambiente, política, derechos humanos, etc.). Las personas ya no están dispuestas a quedarse en un lugar donde no se sienten realmente cómodos con la cultura ni satisfechos con el sentido de propósito que persigue la empresa.