El principal objetivo de la investigación llevada a cabo por Iaraf fue identificar y presentar cómo en ciudades extranjeras las empresas de energía eléctrica brindan a sus clientes información respecto a los distintos tributos indirectos que recaen en el servicio y su impacto en la factura. Además, se compara la carga tributaria indirecta que recae sobre el consumo de electricidad residencial.
En la primera parte del análisis se muestra la incidencia de cada tributo indirecto en el valor neto de cada factura y la incidencia en el valor final de cada factura, considerando que es tal vez la manera más simple de interpretarlo por parte de un consumidor.
En la segunda parte del análisis se exhibe una comparación entre la carga tributaria indirecta que existe entre las tres ciudades anteriormente mencionadas.
Por último, se presenta el grado de visibilidad de la carga tributaria del servicio de energía eléctrica residencial de las ciudades de Buenos Aires, Barcelona y Miami. Se busca identificar cómo informan al consumidor el origen de los costos de su factura.
Para llevar a cabo esta investigación se utilizaron facturas de cada una de las ciudades. No obstante, para Barcelona se tienen dos casos, el actual, que cuenta con grandes reducciones tributarias debido a la guerra en Ucrania, cuyo vencimiento sería en el mes de diciembre de 2023, y el caso habitual sin estas reducciones.
Es importante recordar que la carga tributaria indirecta se caracteriza por recaer sobre el precio de un bien o servicio, penalizando, a través de su encarecimiento relativo, su consumo.
El caso de Miami
En Miami, el peso tributario indirecto sobre el valor neto de una factura de luz es del 18%, lo que implica que, al consumo neto de un ciudadano (compuesto por cargos fijos y consumo por kWh), se le carga un 18% de tributos indirectos. El 50% de la carga tributaria está explicada por el impuesto sobre servicios públicos municipal, el 35% por el tributo municipal por franquicia, el 15% por IIBB (estadual) y el 0,1% por la tasa regulatoria (estadual).
Al analizar el peso de los tributos indirectos sobre el valor final de la factura, se observa que, para el caso de Miami, del 100% del valor total de la factura, la carga tributaria indirecta es de 15%.
El caso de Barcelona
En Barcelona, el peso tributario indirecto habitual sobre el valor neto de una factura de luz es del 35%, lo que implica que, al consumo neto de un ciudadano (compuesto por cargos fijos y consumo por kWh), se le carga un 35% de tributos indirectos. El 60% de la carga tributaria está explicada por el IVA, el 20% por el impuesto sobre la producción de luz, el 15% por el impuesto a la electricidad y el 5% por la financiación del Bono Social.
Al analizar el peso relativo de cada componente sobre el valor final, se observa que, para el caso de Barcelona, del 100% del valor total de la factura, la carga tributaria indirecta es del 26%.
En Barcelona, actualmente el peso de los tributos es inferior. En el denominado Barcelona actual, el peso tributario indirecto sobre el valor neto de una factura de luz es del 7,3%, lo que implica que, al consumo neto de un ciudadano (compuesto por cargos fijos y consumo por kWh), se le carga un 7,3% de tributos indirectos. El 68% de la carga tributaria está explicada por el IVA, el 25% por la financiación del Bono Social y el 7% por el impuesto a la electricidad.
Al analizar el peso relativo de cada componente sobre el valor final, se observa que, para el caso de Barcelona actual, del 100% del valor total de la factura, la carga tributaria indirecta es de 5,4%.
El caso de Buenos Aires
En Buenos Aires, el peso tributario indirecto sobre el valor neto de una factura de luz es del 32%, lo que implica que, al consumo neto de un ciudadano (compuesto por cargos fijos y consumo por kWh), se le carga un 32% de tributos indirectos. El 65% de la carga tributaria está explicada por el IVA (nacional), el 20% por la contribución municipal, el 12% por IIBB (provincial) y el 3% por el impuesto al cheque (nacional).
Al analizar el peso relativo de cada componente sobre el valor final, se observa que, para el caso de Buenos Aires, del 100% del valor total de la factura, la carga tributaria indirecta es de 24,3%.
Análisis comparativo entre Buenos Aires, Barcelona y Miami
Al comparar el peso actual de los tributos indirectos entre las tres ciudades, se aprecia que la ciudad de Buenos Aires es la de mayor carga tributaria, seguida por Miami y Barcelona actual. Las diferencias son significativas. Es importante recordar que en el último informe del Iaraf se informó que la carga tributaria en el interior del país es todavía mayor.
Si se toma como referencia a Buenos Aires, la carga de Miami es equivalente al 56% y la de Barcelona al 22%.
Teniendo en cuenta que hasta diciembre del 2023 rige la reducción en Barcelona, resulta interesante comparar las ciudades sin dicha disminución. Al considerar a la Barcelona sin reducciones por la guerra, su carga se eleva al 35%, lo que la ubica en el primer lugar.
¿Cómo es la visibilidad tributaria en Buenos Aires, Barcelona y Miami?
De las tres ciudades analizadas, la ciudad con mayor visibilidad de la carga tributaria sobre el servicio residencial de energía eléctrica es Barcelona, ya que la propia factura presenta gráficamente la discriminación de los distintos conceptos en términos porcentuales, entre ellos el tributario. Le sigue Miami, que presenta gráficamente la discriminación de la factura, pero en la página web de la empresa prestadora del servicio. Además, está en valores y no incluye a los tributos municipales, lo que no facilita la real dimensión del porcentaje de carga tributaria. Y por su parte, en Buenos Aires directamente no se presenta un gráfico que facilite el entendimiento por parte del usuario de la composición de la factura que está abonando.