Productores tamberos tienen en carpeta un proyecto para generar energía con el excremento de las vacas, una tecnología que está creciendo en varios países del mundo pero que necesita de financiamiento a largo plazo, se sabe, una deuda pendiente.
Así lo contaron a EcoNegocios Raúl y Nicolás Barrea, padre e hijo y vicepresidente y director de Don Aladino, uno de los casos de éxito que se presentaron ayer en el encuentro Buenos Negocios que llevó a cabo el Banco Galicia en el Sheraton Córdoba Hotel.
El proyecto
Así lo contaron a EcoNegocios Raúl y Nicolás Barrea, padre e hijo y vicepresidente y director de Don Aladino, uno de los casos de éxito que se presentaron ayer en el encuentro Buenos Negocios que llevó a cabo el Banco Galicia en el Sheraton Córdoba Hotel.
El proyecto
Los 500 animales que tiene el establecimiento Don Aladino están distribuidos en un “tambo calesita” y producen 15.000 litros de leche por día.
“En 2010 empezamos una etapa de inversiones con la construcción de un ‘tambo calesita’ y hoy es uno de los tres o cuatro tambos más modernos del país. La primera inversión fue el cambio en el método del ordeñe pero todo el plan estratégico está pensado en el cuidado ecológico”, contó Barrea hijo. De acuerdo a diarios de hace unos años, la inversión rondó el millón de dólares.
La primera etapa del proyecto para generar energía para todo un pueblo ya está funcionando ya que el tambo tiene techos diseñados para el recupero del agua de lluvia y toda el agua utilizada en el ordeñe va a parar a dos lagunas de 70 metros de largo por 20 de ancho y 8 de profundidad donde por un proceso aeróbico se separan sólidos y líquidos, que vuelven a reutilizarse para lavar los pisos.
“Lo sólido se utiliza en parte como abono natural, la idea es que en el proceso, cuando se generan el gas metano, se cierre esa laguna y se transforme en biogás o energía que pueda interconectarse al sistema”, explica Nicolás Berrea.
Estima que por la cantidad de animales que tiene Don Aladino más otros dos tambos de similar tamaño que funcionan en la zona se podría generar energía eléctrica para todo el pueblo.
“Es una tecnología probada y que funciona, pero que necesita de grandes inversiones. Lamentablemente no hay créditos o beneficios a muy largo plazo como existen en otros países”, explica.
¿Por qué el Galicia los presenta como un caso de éxito?, preguntamos.
“Quizás por la forma de encarar el negocios, hemos tratado de encarar la empresa pensando fundamentalmente en los recursos humanos e invirtiendo en tecnología para darle sustentabilidad al negocio. Quizá la vieja forma de producir sea más rentable hoy, pero no lo es a largo plazo”, dijo Raúl Barrea, yerno del fundador del establecimiento.
Mira acá cómo funciona el moderno tambo de Don Aladino y cómo se reutiliza el agua para lavar el piso del emprendimiento.
“En 2010 empezamos una etapa de inversiones con la construcción de un ‘tambo calesita’ y hoy es uno de los tres o cuatro tambos más modernos del país. La primera inversión fue el cambio en el método del ordeñe pero todo el plan estratégico está pensado en el cuidado ecológico”, contó Barrea hijo. De acuerdo a diarios de hace unos años, la inversión rondó el millón de dólares.
La primera etapa del proyecto para generar energía para todo un pueblo ya está funcionando ya que el tambo tiene techos diseñados para el recupero del agua de lluvia y toda el agua utilizada en el ordeñe va a parar a dos lagunas de 70 metros de largo por 20 de ancho y 8 de profundidad donde por un proceso aeróbico se separan sólidos y líquidos, que vuelven a reutilizarse para lavar los pisos.
“Lo sólido se utiliza en parte como abono natural, la idea es que en el proceso, cuando se generan el gas metano, se cierre esa laguna y se transforme en biogás o energía que pueda interconectarse al sistema”, explica Nicolás Berrea.
Estima que por la cantidad de animales que tiene Don Aladino más otros dos tambos de similar tamaño que funcionan en la zona se podría generar energía eléctrica para todo el pueblo.
“Es una tecnología probada y que funciona, pero que necesita de grandes inversiones. Lamentablemente no hay créditos o beneficios a muy largo plazo como existen en otros países”, explica.
¿Por qué el Galicia los presenta como un caso de éxito?, preguntamos.
“Quizás por la forma de encarar el negocios, hemos tratado de encarar la empresa pensando fundamentalmente en los recursos humanos e invirtiendo en tecnología para darle sustentabilidad al negocio. Quizá la vieja forma de producir sea más rentable hoy, pero no lo es a largo plazo”, dijo Raúl Barrea, yerno del fundador del establecimiento.
Mira acá cómo funciona el moderno tambo de Don Aladino y cómo se reutiliza el agua para lavar el piso del emprendimiento.
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