Córdoba -y Argentina- están lejos de Francia, y a pesar de la globalización, el escándalo por el ¿fallido? caso de espionaje industrial ha llegado muy atenuado. Pero en el país galo el caso ha tomado proporciones casi escandalosas, a tal punto que el mismísimo Carlos Ghosn, Presidente de Renault-Nissan debió concurrir a dar explicaciones al gobierno francés. No solo por lo delicado del tema, sino porque además, el estado de ese país cuenta con un 15% de las acciones de la empresa, el mayor porcentaje entre los accionistas.
Retrocedamos unos meses. En Enero Renault denunció a 3 ejecutivos de espionaje, relacionado con sus desarrollos en vehículos eléctricos, y aparentemente vinculado a China, lo cual no sonaba descabellado. Es más, despidió a sus –ahora ex- empleados y divulgó las causas perjudicando fuertemente a los 3.
La investigación mencionaba depósitos a cuentas en Suiza y Liechtenstein por más de 600,000 €, por la entrega de secretos industriales.
Parecía caso cerrado. Todo concordaba. Parecía.
Las palabras de Patrick Pelata (Director General de Operaciones, y segundo de Ghosn) fueron elocuentes: “O estamos frente a un caso de espionaje y un ejecutivo de la Dirección de Seguridad proteje a su fuente, o la empresa es víctima de un caso de manipulación, de una estafa”.
Finalmente, Pelata presentó su dimisión, la que no fue aceptada por su Presidente, y Ghosn recibió el apoyo necesario para seguir al frente.
La marca debió pedir disculpas publicamente, convocar nuevamente a los 3 ejecutivos despedidos y comunicarles que se los indemnizaría por el daño provocado.
El tema no está cerrado y una comisión del gobierno se encuentra investigando el caso para determinar responsabilidades. Renault reconoció que no tuvo la rapidez necesaria ya que conocía estas irregularidades desde hacía 7 meses.
La Presidente del Partido Socialista de Francia fue dura con Ghosn: “Cuando un empleado comete un error en una compañía, no debe pedir disculpas, está despedido”
Esperaremos el desenlace del caso, aunque luego de las disculpas de sus directivos y el resarcimiento, no se esperan grandes novedades.
Escándalo internacional: Renault y un ¿falso? caso de espionaje
(Por José Manuel Ortega) ¡Que escándalo se armó en Francia! Renault echó a 3 ejecutivos acusándolos de espionaje industrial relacionado con sus desarrollos eléctricos. Ahora dio marcha atrás. ¿Fue un error?
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