De aroma fresco y chocolatado al quemarse entrega un humo suave y agradable.
En boca, tiene el particular encanto de aquellos productos que “saben de la misma manera que huelen”. La sensación de estar saboreando un medallón de menta con chocolate se hace presente en todo momento de la fumada sin llegar a empalagar o relajar.
Todas estas características lo hacen el compañero ideal para tardes cálidas y sobremesas.
Combina bien con cafés finos, bombonería, frutos secos bañados en chocolate, anís, amaretto y malbec.
¡Participá de la InfoTrivia de hoy y ganá de estos tabacos!
Tu opinión enriquece este artículo: