Apostilla:
Recuerdo (aunque no tengo derecho a pronunciar ese verbo sagrado) que en la fabulosa película “La Decadencia del Imperio Americano” (*) uno de los personajes -profesor de Historia- explicaba a sus alumnos (la cita no es textual, pero así la recuerdo): “la Historia siempre ha sido una cuestión de número, por eso alguna vez Nelson Mandela gobernará Sudáfrica y nunca un negro lo hará en EE.UU.”.
Menos de 10 años más tarde (la peli es del 86), la profesía se cumplía en Sudáfrica.
Más de 20 años después, era refutada en EE.UU.
¿Será la historia una cuesitón de número y el próximo siglo será de China? ¿O tendremos “imperio americano” para rato?
(*) Recién ahora la veo editada en DVD; también es muy buena su secuela: Las Invasiones Bárbaras, dos filmes con la mirada ácida y sumbona de los “primos” canadienses.
Cambia el “emperador”... ¿cambia el Imperio?
Las imágenes y los comentarios sobre Barack Obama inundarán hoy el mundo y -proporcionalmente- pocos habitantes del planeta serán ajenos a la noticia de la asunción del nuevo presidente de los EE.UU., la nación que produce el 25% del PBI mundial (uno de cada cuatro de tooodos los dólares del mundo) y que casi consume un tercio de la energía mundial pese a aportar sólo el 4,5% de la población planetaria.
Pero las cosas no andan bien por el imperio: EE.UU. ingresa a un año que -todo lo indica- marcará la peor crisis en el último siglo y algunos ven en esto una bisagra que cambiará el dominio mundial de los EE.UU. Primero será en el plano económico -auguran- y luego -inevitablemente- en el político (que la política no es otra cosa que “economía concentrada”, ¿no?).
Los desafíos del primer presidente “afroamericano” (¿es poco “polite” decir “negro” aquí también?) son fabulosos. La expectativa es grande. Quizás las fuerzas de la debacle del imperio americano también sean inexorables y llegue el turno de China (el tercer PBI detrás de EE.UU. y Japón pero el 20% de la población mundial). Quizás (¿ojalá?) nazca un mundo más multipolar. Quizás sólo cambie el Emperador para que poco cambie en el Imperio. Como sea, una nueva etapa se inicia... ¿vos cómo la ves?
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