Es el snack mucho más saludable de la góndola, se hace en tres minutos al microondas y -cuando lo ponen en la mesa- todos se “prenden” al picoteo. Pero el pochoclo (o popcorn) no está arraigado en la cultura de consumo hogareño y en esa batalla está empeñada Marlom’s, una empresa argentina que se inició a fines de los 90, imitando la propuesta que la marca Newman’s Own (cuya etiqueta tiene un dibujo del popular Paul Newman).
Ahora, en manos de Agustín Parma (gerente general) y otros dos socios, Marlom’s vende unas 2 millones de unidades al año, 85% en Argentina y 15% en Uruguay, pero con planes de llegar en los próximos meses a Perú, Colombia, Chile y Paraguay.
Para afrontar este despliegue de mercados, la empresa está montando una nueva máquina (desarrollada en el país) que permitirá una capacidad instalada (a doble turno) de 8 millones de unidades.
Presente en las principales cadenas de retail del país, el popcorn Marlom’s viene en variedades dulce, natural y salado, opción que a su ver puede ser con sabor a manteca, manteca light o queso.
Marlom’s, la empresa argentina que quiere convertir al pochoclo (al microondas) en el snack hogareño
Aunque Argentina es un gran productor de maíz pisingallo, el consumo hogareño de pochoclo (o popcorn) es muy pequeña, no sólo en relación a EE.UU. (capital del consumo), sino también en referencia a otros países de la región. La batalla por expandir la categoría la lleva adelante Marlom’s, una empresa que ya vende 2 millones de unidades al año y está duplicando su capacidad de producción.
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