Adoratta no nació de la noche a la mañana. Di Paolo, creadora de la marca, diseñadora indumentaria profesional y recibida en la UBA, ya mostraba desde su infancia un interés por la creación y el mundo de la moda. En este camino tuvo mucho que ver la influencia de su abuela, que desde pequeña le enseñó a coser y la acompañaba a realizar cursos de corte y confección.
En 2005, luego de varios años de formación académica e impulsada por el espíritu emprendedor de su familia, Gisela dio los primeros pasos en el rubro al fabricar sus primeras carteras. En medio del auge del diseño independiente, el año 2008 fue determinante para la vida de la emprendedora, nace Adoratta. Se trata de carteras puramente artesanales, con diseños exclusivos “y fabricados con insumos de la mejor calidad”, dicen.
Cuando Gisela logra invertir un capital inicial de US$ 2.500, pasó de vender 1.000 carteras anuales a más de 50.000.
La historia de Adoratta
En sus comienzos, el emprendimiento creció en las ferias de Palermo Soho, donde se encontraba su puesto de venta. Con el tiempo, las producciones de la marca empezaron a visibilizarse cada vez más y obtuvieron el reconocimiento de los clientes.
“El éxito de las ventas y las repercusiones de su producción permitieron a Adoratta hacerse de un local propio ubicado en la calle Armenia del barrio de Palermo”, destacan desde la marca. “Esto me permitió mayor reconocimiento sin perder vínculo con las clientas”, completa Gisela.
Su plan para expandirse
Comenzarán por Córdoba ingresando los productos a locales mayoristas multimarca. Más tarde lo harán en el resto de las provincias.
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