Rasti y esas cosas que no tienen precios (para todo lo demás está tu tarjeta de crédito, ¿no?)

Rubén Perón: “Hola Íñigo: ¡por supuesto que jugué con Rasti! Es uno de mis mejores recuerdos de la infancia. Nos lo trajo de regalo -a mi hermano y a mí- mi hermana mayor al regreso de su viaje de bodas... Y todavía tengo prendido en mi mente y en mi corazón, no sólo la cantidad de cosas que inventamos, sino ese momento mismo en que abrimos el paquete y nos encontramos con semejante maravilla”.

Mariano: “Le pedimos a uno de los Papá Noel que tiene mi hijo que le regalara unos Rasti. Y ahí llegaron: rastis marca Rasti. La verdad un excelente regalo que justifica su precio por los momentos que te hace compartir con los hijos”.

Juguetes en el recuerdo (camino a Reyes Magos) aquí

Alfa Pampa: fabrica más de un millón de alfajores por mes y quiere seguir creciendo (facturación proyectada: $ 4.000 millones en 2026)

En un país donde el alfajor es mucho más que “un producto”, lograr diferenciarse parece una tarea titánica. Sin embargo, desde una planta bonaerense y sin grandes campañas de marketing, Alfa Pampa consiguió construir una marca con alcance nacional, presencia internacional y una premisa clara: competir en calidad sin entrar en la carrera del alfajor más barato.