Conversamos con los protagonistas de esta historia, Mariela y Ariel, quienes compartieron los secretos detrás de su éxito y el amor por la pastelería que impulsó su negocio durante más de dos décadas.
“Nosotros largamos en el 2000, con alfajorcitos nada más, con una repostería artesanal muy chiquita en algunos tiempos libres. Y fuimos incorporando algunos productos de a poquito hasta que surgió la idea de hacer capias. En ese momento es como que ya se transformó en la estrella nuestra. Ahora es como que todo el resto es secundario y acompaña a la capia”, cuenta Mariela.
Desde su inicio, Capias MyA se destacó por la calidad y el sabor de sus productos. Los primeros pasos del emprendimiento fueron impulsados por los elogios de amigos y familiares, quienes continuamente animaban a la pareja a comercializar sus creaciones.
¿Qué hace a la capia tan especial? “La capia es un alfajorcito que tiene tres capas, relleno de dulce de leche y la masa tiene bastante manteca, y no lleva huevo. Es como muy tiernita, se deshace en la boca, y no lleva baño de chocolate. Es como un sabor muy natural”, explica Mariela.
La textura suave y el sabor auténtico de las capias conquistaron los paladares de Bell Ville. Este alfajor, que se deshace en la boca y siempre está relleno de dulce de leche, se convirtió en el producto estrella de Capias MyA.
De la tradición a la masificación: la capia existe desde hace aproximadamente 80 años, pero fue Capias MyA quien logró masificar su consumo. Ariel comenta: “El vendedor puede ser bueno, pero si el producto es excelente, se vende solo. Nosotros lo masificamos un poco”.
Como en cada ocasión que nos encontremos, reiteramos la invitación a sumarte, a seguirnos, a ser parte de esta movida que involucra a todos los cordobeses, porque todos #somosutuco.
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