En Adolfo Orma 1770 (Urca), una casona típica de los años 80 se transformó en una casa de huéspedes de la mano de Marina Duran, dueña y fundadora.
Slow Guest House es un hospedaje que fue pensado para recibir a acompañantes de tratamientos clínicos, por su proximidad con 15 importantes centros de salud. Sin embargo, sus puertas también estarán abiertas para deportistas, empresarios o turistas que quieran alojarse allí.
La nueva casa de huéspedes de 1.000 m2 cuenta con 20 plazas, 4 baños, cocina (completamente equipada), living; cocina comedor; un espacio para el guardado de las pertenencias personales con seguridad, jardín con pileta, quincho y asador, y un deck para el descanso y la lectura. Además tiene un jardín de mariposas, que destaca su estilo particular.
“Hay quince centros médicos cercanos y pensamos en los familiares que deciden venir a acompañar a quienes deben realizarse tratamientos. Estamos ubicados en Urca, un barrio que queda a medio camino entre el norte de la ciudad y el centro, muy bien arbolado y cercano a dos de los parques recreativos y deportivos más importantes que tiene Córdoba como el Parque de las Naciones y el Kempes. Nuestra ubicación es estratégica para cubrir las necesidades de todos los huéspedes que vienen a visitarnos. Ofrecemos un espacios familiar, cálido, seguro, con autonomía y descanso agradable. Queremos que el que nos visite, se sienta como en su casa”, explica Marina Duran, dueña y fundadora.
Hospedaje y actividades
Slow Guest House ofrece una grilla de actividades opcionales para los huéspedes (y los cordobeses que se quieran sumar). En la “carta” figuran caminatas guiadas por la ciudad de Córdoba, cursos de Reiki y Meditación, meriendas temáticas, talleres de pintura, plástica, charlas específicas, entre otras.
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