PATRICIA VALLI - Subeditora de Economía y Política
Con el visto bueno de la canciller alemana, Angela Merkel, el Gobierno confía en el aplazamiento del pago por u$s 2.400 millones con el Club de París. La comunicación formal dependerá de los tiempos de los acreedores. "No hay urgencia por el vencimiento del próximo lunes 31", remarcan desde el Ejecutivo.
El grupo de acreedores se reunirá a principios de junio, como es habitual, bajo el formato virtual que mantuvieron en los meses de pandemia. El Club que dirige Emmanuel Moulin mantiene encuentros mensuales, salvo en la temporada alta de verano europeo. Allí definirán si hay respuesta formal a la carta que envió Martín Guzmán a principios de abril, donde pide postergar el vencimiento y asegura que hay negociaciones con el FMI por un acuerdo de facilidades extendidas.
La promesa del Gobierno a los países acreedores es que se pretende llegar a un acuerdo con el FMI "lo más rápido posible" y que las medidas apuntan a la recuperación de la economía con atención a la población vulnerable pero con "prudencia fiscal" y medidas para bajar la inflación.
Guzmán indicó que para asegurar que el programa con el FMI tenga amplio apoyo social, el Gobierno está en un proceso de "búsqueda de consensos políticos y sociales frente a las políticas clave". Sin embargo, las diferencias dentro del Frente de Todos, le juegan en contra a las pautas del ministro y al Presidente Alberto Fernández, que encabeza las negociaciones tras la gira europea.
Por eso los sectores más escépticos de los acreedores remarcan que un programa con el FMI es condición para renegociar con el Club de París. Para esto, sería necesaria la firma de una carta de intención con el organismo con sede en Washington DC. Para poder avanzar en ese compromiso, el Fondo debería volver a realizar una revisión de las cuentas prevista en el artículo IV de su estatuto.
Sin embargo, desde el Gobierno remarcan que la negociación se tornó política y que, "en esta instancia, el artículo IV no sería necesaria". El Fondo Monetario no confirmó hasta el momento la realización de una revisión formal. El estado de las cuentas formó parte de la última reunión que tuvo Guzmán con Julie Kozack, la vicedirectora para el Hemisferio Occidental del FMI, en la previa a la reunión de Alberto Fernández con Kristalina Georgieva en Roma.
Por eso también confían en que en las próximas semanas, el Club confirmará el "puente" para prorrogar el vencimiento hasta que se firme la carta de intención con el Fondo Monetario. El kirchnerismo espera que el debate por las políticas fiscales y monetarias que implica un acuerdo con el FMI, queden fuera de la discusión en la campaña electoral.
A partir de allí, Guzmán podrá sentarse con el Club de París a renegociar las condiciones del acuerdo firmado por Axel Kicillof en 2014, sobre el que cuestionó las altas tasas que implica el convenio vigente.
Tu opinión enriquece este artículo: