Pablo Kiesel, Gerente de Nuevos Negocios de Raghsa, desarrolladora con un portfolio de 96.000 m2 construidos, de los cuales el 87% está certificado L.E.E.D., asegura que este tipo de oficinas son buscadas por “grandes corporaciones que desean espacios eficientes de gran superficie y con ciertos requerimientos técnicos tales como piso técnico, grupos electrógenos, detección y extinción de incendios. Mientras que en los últimos años un requisito casi excluyente es que las oficinas sean sustentables, por lo que la certificación L.E.E.D es un aspecto muy importante.”
Pero además de los beneficios ambientales que implica una oficina de este tipo en comparación con una oficina clase A, se suman las posibilidades de ahorro económico que implica habitar estos espacios. Por ejemplo, si bien “la diferencia de precio de alquiler tal vez sea sutil todavía, seguramente una oficina L.E.E.D. se alquilará más rápidamente y tendrá a lo largo del tiempo una menor vacancia” porque permite ciertas ventajas diferenciales como “un mejor uso de recursos no renovables (agua, electricidad, gas) y por lo tanto menor costo de expensas y servicios públicos. De hecho, por diseño y construcción también implica un mejor ambiente de trabajo para las personas que lo habitan”, según afirma Kiesel.
Al respecto, el ingeniero asegura que al momento de diseñar Madero Riverside, utilizaron la última tecnología disponible, para asegurar que el edificio cuente no sólo con espacios que fomenten una mejor calidad de vida, sino que además las compañías que los alquilen puedan acceder a ventajas económicas como el 20% de ahorro en consumo de energía y agua, gracias a la implementación de los siguientes dispositivos: luces led de bajo consumo, equipos eficientes de aire acondicionado, vidrio DVH de alta performance, griferías eficientes y uso de agua de lluvia.
La implementación de luces led, explica Germán Fiocchini, gerente de marketing de la división Iluminación de Philips para el Cono Sur, implica un ahorro energético y económico, en tanto su índice de recambio es de entre 10 y 15 años y consume 90% menos que una lamparita convencional, lo cual se ve reflejado en una reducción del 26% en el costo de servicio eléctrico cada 325 m2 de superficie. Mientras que la implementación de 8 paneles solares en el techo de un edificio, permite una reducción de las facturas de luz y gas en un 80%, gracias a la utilización de energía solar para la calefacción.
En este sentido, Raghsa pretende brindar mayor calidad en cada uno de sus nuevos proyectos, asumiendo para ello el compromiso tanto con el medio ambiente y el capital humano que habita las oficinas L.E.E.D.; como también con los deseos y necesidades de una generación de empresarios green cuyo mayor objetivo es la innovación, el confort, y la calidad de los espacios de trabajo.
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