Qué comemos cuando comemos: la Ley de etiquetado frontal y sus implicancias (y lo que no te dicen los octógonos negros)

La Ley de Etiquetado Frontal de Alimentos ya fue promulgada y seguramente muchos de nosotros ya vimos en las góndolas del supermercado distintos productos con los famosísimos octógonos negros. Para poder entender un poco más sobre lo que esta ley abarca, y sus consecuencias, mantuvimos una charla con el director de la Licenciatura en Nutrición de la Universidad Siglo 21, Gerardo Gasparutti, y la coordinadora de la carrera, Paola Carmona.

InfoNegocios: ¿Qué opinan sobre la Ley de Etiquetado Frontal?

Gerardo Gasparutti: En realidad la Ley de Etiquetado, que la conocemos por ahí como Ley de Etiquetado Frontal, se conoce técnicamente con el nombre de Ley de Promoción de la Alimentación Saludable. Yo siento que el sistema de etiquetado de nuestros alimentos venía desde hace mucho tiempo con muchos grises que favorecían cada vez más a la industria del alimento y perjudicaban mucho al consumidor, porque esos grises rozaban un poco la desinformación, rozaban el engaño, rozaban esa falta de información. La Ley de Etiquetado Frontal, es como una gran ley que viene un poco a trabajar de manera más integral en esa información que se le brinda al consumidor de manera que la misma sea clara, sencilla y que el consumidor tenga de una manera rápida una información para decidir qué comprar y qué no. O por lo menos decidir o entender qué es lo que está comprando. 

Paola Carmona: Es importante recordar que en nuestro país las enfermedades crónicas no transmisibles como la obesidad, sobrepeso o diabetes, tienen una altísima prevalencia, incluso a nivel regional, entonces la ley viene a trabajar mucho ese lado también. No es simplemente una ley que viene a llenar de sellos los alimentos.

IN: ¿Qué objetivo tienen los octógonos?

GG: Y primero está bueno destacar uno de los principales objetivos que tiene una etiqueta, que es entre otras cosas informar y orientar la decisión de compra de la persona, que sepa qué es lo que hay dentro de ese paquete a la hora de comprar. En cuanto a la decisión de colocar el octógono, se discutía acá en Argentina, por un lado, desde los distintos organismos, y por otro lado, desde la industria, entre dos sistemas: uno era el sistema de advertencia (que te dice, este alimento contiene exceso en ciertos nutrientes) y el otro sistema era el Nutri-Score (es como si fuera un semáforo que va del verde al rojo, donde el verde es A, un verde más oscuro es B, un amarillo es C, un naranja es D y un rojo es G). Este último, presentaba algunas inconsistencias ya que no terminaba de definir exactamente al producto, por ello, se recurrió al primero. Además, se entendió que el sello de advertencia era bastante más agresivo para llegar a la población y para que la población sepa qué es lo que hay dentro de los alimentos. 

PC: Mediante la información que contiene la etiqueta, uno debería entender lo que dice la etiqueta para poder después, como dice Gerardo, consumirlo o no. 

IN: ¿Por qué hay a muchas personas que les “desagrada” el hecho de ver los productos que consume con los octógonos negros?

PC: Yo creo que le desagrada porque le está haciendo saber al consumidor que lo que está comprando le va a hacer mal. Esto que dice, exceso en grasa, exceso en azúcares, exceso en sodio, tiene como el cartel gigante que dice exceso, que no todas las personas saben lo que significa esa palabra: exceso. Me pasó con mi hijo, me dice “mami ¿qué significa exceso de azúcar? Y bueno, que tiene mucha azúcar. Ah, entonces hace mal”. 

IN: ¿Qué ocurre con los productos que tienen figuras reconocidas, y a su vez, sellos con excesos?

GG: La ley menciona que está prohibida la publicidad, la promoción o un patrocinio de un alimento que contenga al menos un sello dirigido a los niños o a las niñas o a los adolescentes. Si el alimento tiene al menos un sello, ese paquete no puede tener ningún deportista famoso, ningún dibujito que atraiga a la compra, sobre todo al niño, porque el niño, por ahí, o la niña, o los adolescentes, no tienen forma de utilizar su decisión de compra. Entonces obviamente van y piden y compran en relación a lo que ven.

Además, si vos tenés un alimento con un sello no lo podés poner en promoción 2x1, no lo podés poner en oferta para que la gente lo compre en mayor cantidad. Tampoco puede estar a la venta en entornos escolares, está prohibida la venta de un producto que contiene sello o rectángulo. Entonces, todo esto también lo toca la ley.

PC: La obesidad en los niños es realmente preocupante, 4 de cada 10 niños o es obeso o tiene sobrepeso. En nuestro país, sobre todo la obesidad infantil es un gran problema que se debe, justamente como dice Gera, a que el consumo de los niños no es por lo que contenga, sino el “Cómprame porque está Messi, cómprame la pasta porque aparece tal cosa, o voy a ganar tal otra”. Entonces un poco lo que quiere hacer la ley es justamente prohibir estas imágenes para evitar el consumo.

IN: ¿Cómo es el tema de la industria, la publicidad y la nueva ley?

GG: La ley habla de que en un medio gráfico o en un medio digital también debería estar inserto el sello de forma tal que permita ver al público lo que contiene el producto que se está presentando. La ley exige que si vas a hacer una publicidad de algún alimento, deben estar figurados los sellos.

PC: Además empieza toda una discusión sobre el sello en el producto en sí: si está bien colocado (porque el sello debería ir en la cara principal del envase), el sello debería estar visible, el sello debe tener un tamaño, un realce y una visibilidad acorde al resto de la información que está en la etiqueta.

IN: ¿Qué ocurre con las industrias que aún no han aplicado la ley?

GG: Cuando se sancionó la ley, se dio un tiempo para que las empresas pudieran sumarse o pedir una prórroga, entendiendo que todos los alimentos que eran elaborados después del 31 de agosto deberían salir con los octógonos. Obviamente que después del 31 de agosto, no empezamos a ver los sellos, ya que las empresas podían adherirse a lo que se llama el agotamiento de stocks. Obviamente que las empresas cuando elaboran un paquete, elaboran billones de paquetes, entonces se permitía que la industria pueda hacer el agotamiento de estos paquetes. Sin embargo, muchas industrias se agarraron de eso y siguieron produciendo paquetes sin los sellos. 

IN: ¿Cómo repercute la ley en personas que padecen desórdenes alimenticios? 

PC: Negativamente, porque aún más van a rechazar los alimentos. Cuando, por ejemplo, tenemos un caso súper grave, hay que trabajar mucho en lo que es el acompañamiento de esa persona, entonces, la obsesión que tiene por los alimentos es algo que lo invita todo el tiempo a contar las calorías, a ver qué grasas tiene, etc. 

GG: En sentido positivo, el paciente va a decir, bueno, esto no lo como porque tiene mucho de esto, mucho de lo otro. En sentido negativo, estimula más la obsesión por la figura y por no querer comer calorías o por no querer comer grasas o por no querer comer sodio. Sin embargo, creo que el tratamiento de una persona que sufre algún tipo de trastorno de la conducta va mucho más allá de lo que pueda haber en el envase de un alimento. 

IN: ¿Por qué creen que se demoró tanto la ley de etiquetados en la comida en comparación con la ley sobre el etiquetado de los cigarrillos? Porque si hablamos de salud, ambos repercuten en ella…

PC: La ley se viene trabajando desde hace mucho, y en su momento, la ley de los cigarrillos perjudicó obviamente a la industria del trabajo. Eso mismo pasa con los alimentos, vos le tenés que poner una etiqueta a tu producto que dice que va a producir un daño, la gente va a dejar o disminuir la compra del producto, lo que repercute en la ganancia de las industrias. El sistema de etiquetados se demoró por esta cuestión, porque se trabajó mucho desde y con las industrias.

IN: Agarré tres productos al azar de mi casa y en la etiqueta trasera leo que un paquete de gelatina dice: “Puede contener leche”, ¿qué significa esto?

GG: Bueno, eso está en todo un capítulo aparte que se trabajó mucho en el Código Alimentario Argentino. Hay un capítulo que se llama Normas para la Publicidad y Rotulación de los Alimentos, que habla estrictamente y exclusivamente de todo lo que es rotulación de los alimentos. Allí hay un artículo que habla sobre los alérgenos (sustancias que pueden desencadenar una reacción en el organismo). Esencialmente hay aceptados y estudiados 10 alérgenos que son mundialmente reconocidos, entre ellos los lácteos, los frutos secos, pescados, crustáceos, trigo y demás. Entonces volviendo un poquito a lo que decías vos, ese artículo tuvo mucha discusión, el “puede contener” qué decís. ¿Qué quiere decir esto? Si bien causa confusión, no se pudo lograr que la industria diga contiene o no contiene ya que es muy difícil. A pesar de garantizar todas las medidas, era muy difícil la probabilidad cero de que un alimento se contamine. Parece ilógico que vos compres una leche y diga contiene leche o que compres maní y diga contiene maní, pero en términos de esta clasificación de alergias que son estos 10 alérgenos mundialmente aceptados, después de la lista de ingredientes, si hay presencia de alguno de esos debería decir contiene o puede contener, tiene que estar esta “alerta” para que esa persona tenga ese conocimiento.

PC: Esto surge justamente porque la línea de producción de ese alimento no es única ni exclusiva. Entonces puede estar contaminada, por eso te dice puede contener leche, porque quizás se usa la misma línea que para la leche y no es adaptada o no tiene una línea exclusiva para la gelatina. Entonces deben informar que puede llegar a contener o no tal o cual alimento.