La iniciativa de dotar a todos los centros industriales del grupo Fiat (incluyendo Chrysler) de este equipamiento provino del director mundial de producción. Y es lógico: muchas veces necesitan mostrarse piezas o explicar procesos que de otra forma se hace muy complicado y exigen la presencia de las personas en los lugares.
La sala de telepresencia cuenta además con una cámara móvil que puede ir a un lugar de la línea de producción y mostrar cómo se hace un proceso industrial.
Toda la tecnología corre bajo IP, pero con un ancho de banda dedicado y específico que garantiza una calidad y velocidad espectacular en imagen y sonido.
Sólo para Ferreyra la sala de telepresencia demandó unos US$ 150.000, pero según las previsiones de la compañía, los ahorros de viajes que origina permiten que la inversión se recupere en el primer año de uso.
Fiat instaló la primera sala de telepresencia de la provincia (ahorra tantos viajes que se paga sola en un año)
Es como si estuvieran todos juntos en la misma sala. De verdad. Aunque una persona esté en Turín y su interlocutor en Detroit, Asia o... Ferreyra. Es que la tecnología de telepresencia que Fiat Auto Argentina acaba de instalar en su planta cordobesa (pegada a las líneas de montaje) es lo último en materia de teleconferencia corporativa. Pero es mucho mejor que las teleconferencias tradicionales: la tecnología Cisco y BT que el grupo contrató a nivel mundial permite dialogar sin delay (las demoras típicas de estas comunicaciones) en una ambientación simétrica que da la sensación de presencia.
Cuando una persona habla, alguna de las cámaras inteligentes capta su intervención y dirige el lente hacia allí, de la misma manera en que -naturalmente- tendemos a mirar a quién nos dice algo.
"Además no hace falta nadie de sistemas que inicie la llamada -explica Adriana Kassabian, de Fiat-; simplemente reservás la sala, entrás y llamás por un teléfono que activa todo el proceso".
(Cuánto costó y cómo se "paga sola" en nota completa).
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