El bar se cerró para esta puesta a punto el 16 de octubre y hoy luce un ámbito realmente hermoso, confortable, con mucha luz, y pensado para que el que cafetea en el centro encuentre en El Quijote su punto de referencia. Como dicen los porteños, cuando alguien pregunta dónde se puede encontrar a tal persona, “para” en tal bar, en el caso de Córdoba la parada de muchos es El Quijote.
Como estas bodas de oro son un hito en la historia del bar, InfoNegocios habló con Ricardo Causa, dueño desde 1999, aunque desde hace años su hija María Paz Causa es quien lleva adelante el timonel de esta unidad de negocios de la familia de manera directa. “El dueño original fue un señor de apellido Ramos que fue quien construyó el edificio en 1973, luego lo compraron dos socios Andrés Lladó y Giargiulo, que al tiempo se separaron y Giargiulo abrió el Sancho en 27 de Abril y Vélez Sársfield”, recordó Ricardo Causa.
“Nosotros lo compramos en 1999 y fue un poco por casualidad, porque un hermano mío quería comprar un bar y lo consultamos con el dueño de Arcafé, y nos dijo que se vendía El Quijote. Lo hablé con Saúl, mi contador, y casualmente también era el contador de Lladó, así que rápidamente nos pusimos de acuerdo en los números y lo compramos“, agregó el dueño de El Quijote.
En ese momento María de la Paz Causa era una niña de pocos años, pero eso no le impedía estar en el día a día del bar, con apenas 10 años fue aprendiendo el oficio que este rubro exige y la templanza de tener un negocio en un país como el nuestro.
Una foto, una historia y una celebración
María de la Paz Causa, que está al frente de El Quijote junto a Emiliano, su esposo, tenía la intención de hacer una renovación. Desde 2019 que venía con la idea dándole vueltas por la cabeza. Las dos últimas modificaciones habían sido en 2006 y 2010. En una de esas últimas renovaciones se fueron los históricos sillones tapizados y con rueditas que eran la marca registrada de El Quijote.
El 5 de enero de 2020 abrieron Amalia, otra unidad de negocios en el local que ocuparan Habitué primero y luego Jardín Florido. Esa apertura demandó una importante inversión y la renovación de El Quijote quedó en el tintero. El 19 de marzo la cuarentena obligatoria dejó truncos los sueños de recupero de la inversión y la remodelación de El Quijote.
“Después de la pandemia dije que ni por casualidad lo reformo, aparte que la gente no venía tanto al centro. El cierre de la 27 de Abril nos hizo un ruido muy importante en el negocio de la esquina que aún hoy lo padecemos porque al no haber colectivos el flujo de gente disminuyó considerablemente y eso afectó a los números de manera bien importante”, contó María de la Paz Causa.
“Una cosa que quiero destacar”, dice Ricardo Causa con un brillo de emoción en los ojos, “es la actitud que tuvieron las hermanas del Monasterio de Santa Catalina, que son las dueñas de los locales que alquilamos, porque sin que nosotros dijéramos nada nos llamaron a una reunión y nos dijeron: ‘Les vamos a cobrar el 50% del alquiler, si tienen lo pagan, si no tienen no lo pagan. Pasó un año pagando el 50%, nos llamaron de vuelta y nos dijeron que el 50% restante de 12 meses lo íbamos a prorratear en 12 meses sin interés. Lo destaco porque para nosotros fue muy importante esa actitud de las monjas”.
“Después de pandemia abrió El Nazareno y Calígula, dos lugares hermosos y la peatonal también se puso muy linda, eso y la foto que fue decisiva”.
“Un día estaba en la caja de El Quijote y con la compu y las redes sociales abiertas y me llega una foto de cuando se estaba construyendo este edificio y el bar. La foto la mandó alguien que la había visto en Córdoba de Antaño y decía 1973. Compartí la foto en el grupo de los empleados y la familia y les dije: cumplimos 50 años, hay que hacer la remodelación”, señaló María de la Paz Causa.
Nuevo concepto de café con la tradición de siempre
La remodelación de El Quijote estuvo en manos del arquitecto Leandro Giraudo, primo de María de la Paz Causa y socio en el estudio Gipe. “Primero me mandó un render con un detalle verde (la nueva barra), el verde es mi color favorito. Y dije sí, eso quiero. La tapicería también es verde. En la parte de los arcos del fondo que tenía unas piedras de la remodelación anterior las tapamos y tienen una obra de la artista plástica Andrea Caliva”, detalló María de la Paz Causa.
“Hicimos una vitrina grande y Alberto Mateu (NdR: crítico literario) que es amigo, nuestro nos traerá un soporte de libro para exhibir el libro Don Quijote de La Mancha, que lo tenemos en un cuadro, y por unos días estará en exhibición. Es un libro con ilustraciones de Gustavo Doré”.
El clásico que no falla
“Un café con un tostado, no hay igual en Córdoba porque siempre trabajamos con materias primas de primera calidad. El sándwich de ternera es de peceto, la milanesa es nalga, lomo es lomo”.
El Quijote, como los bares de tinte más clásico del centro de Córdoba, conserva la carta de papel o al menos plastificada. Es un detalle que al cliente le gusta, lo hace sentir cómodo y no perdido en QR que muchas veces excluyen a quienes no se digitalizaron.
María de la Paz Causa contó también que con El Ruedo tienen una relación de amistad comercial y acuerdan precios de los básicos como cafés y desayunos. Se avisan y así todos trabajan.
Un gobernador y la mesa 10 de los notables
Eduardo César Angeloz ya era Angeloz en 1983 cuando tenía su oficina en la planta alta de El Quijote y no fueron pocas las veces que los mitines se hacían en las mesas del bar. Era un habitué y el mozo Raúl Bustos (hoy jubilado) que trabajó con los Causa hasta hace no mucho tiempo, siempre decía con orgullo que sirvió el café al entonces futuro gobernador de Córdoba.
La mesa 10 ahora es la parada del Corcho Goldberg (Rubén Libros), Alberto Mateu, Ricardo Causa y otros históricos. “La 22 es de nuestro cliente del cortado con medialuna salada, apenas lo vemos entrar ya sale su pedido”, contó María Paz, reflejando el estrecho vínculo que se establece con los clientes.
¿Cuál es la escuela de El Quijote para la atención al público?, quiso saber InfoNegocios. “Nuestra escuela de mozos es Alberto Díaz, hace 40 años que está con nosotros y es un referente. Cuando ingresa un empleado nuevo yo le digo las formalidades de horarios, francos y sueldo; ahora, a la hora de aprender, le digo: hacé todo lo que hace Alberto”.
Inversión para los próximos 10 años (por lo menos)
“La inversión fue de 5 millones de pesos. Hicimos cosas puntuales: electricidad, durlock y tapicería y una máquina de café nueva. Sí vamos a tener todo un sector donde se exhibirá la panadería que es toda de elaboración propia. La carta en general sigue igual, sí agregamos un par de meriendas con cereales y palta”.
“Esperamos que esta inversión sea para los próximos 10 años por lo menos. Para el invierno tenemos algunos planes como colocar estufas para acondicionar la parte de la galería”.
¿Cuál es la clave de un negocio gastronómico exitoso?, consultó InfoNegocios: “Fortalecer relaciones con cliente interno, cliente externo y proveedor”, asegura María de la Paz Causa. “Hay que tener crédito, no plata.
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