Comprar o vender una propiedad, en ocasiones, puede ser riesgoso. Ante una operación de este tipo suelen aparecer preguntas tales como ¿Cuál es el valor de mi propiedad? ¿Cuál es la situación actual del mercado? ¿Qué tipo de propiedad estoy buscando? ¿El precio es el correcto? ¿Es un barrio seguro? ¿Qué oferta debería realizar?
Para responder adecuadamente a estas y otras preguntas que puedan surgir, la recomendación suele ser contar con la asesoría de un profesional inmobiliario.
En esta nota, Franco Acosta, un corredor inmobiliario de reconocida trayectoria en la zona, nos revela su guía de trabajo a la hora de comprar o vender un inmueble.
En el caso de la venta, Acosta señala que lo primero que contemplan es la necesidad del propietario. “Para eso realizamos una escucha atenta, con el objetivo de entender los motivos de esa venta”, dice a InfoNegocios.
Y señala que antes de ofrecer el inmueble conviene prepararlo, para minimizar los riesgos de “ataque” al precio. “La idea es mostrar la vivienda en su mejor versión”, dice.
Tras la primera visita del interesado la inmobiliaria realiza una encuesta sobre las impresiones del inmueble. “A nuestros clientes les sugerimos que no interfieran en la exposición del corredor. Él sabe cómo guiar la visita”, dice apoyándose en su experiencia.
Acosta aclara que su estrategia se basa en un plan de marketing probado, aunque dice que siempre está la posibilidad de volver a revisarla con los propietarios.
¿Cuánto cuesta su propiedad?
El paso siguiente es tasar el bien. “Este surge de otras ventas realizadas y de ofertas de propiedades que hay en el mercado. Con esto podemos fijar el precio de salida del mercado”, explica. Y aclara que el valor tasado es un valor sugerido por la inmobiliaria, pero será el propietario el que finalmente lo fije.
“El riesgo de poner un precio alto es que la propiedad se puede estancar en el mercado, dado que los clientes la desestiman por el costo, y al final hay que bajar el precio de manera agresiva. El peligro, en este caso, es que por lo general los potenciales clientes no quieren comprar lo que antes otros han descartado”, señala.
Guía para el comprador
Comprar un inmueble tiene sus reglas. Y, antes de hacerlo, convendría responderse algunas preguntas básicas: ¿El precio es el correcto? ¿Es un barrio seguro? ¿Qué oferta debería realizar? ¿Hay propiedades similares a un precio más conveniente? ¿Cuánto hace que la propiedad está en el mercado?
Lo primero que un corredor inmobiliario hará será hablar con los clientes. En esa reunión tratará de entender cómo es la vivienda que desean. Y, lógicamente, el presupuesto de inversión que pueden realizar.
“A veces surgen algunas diferencias entre el deseo y el poder de compra. Para estos casos aportamos otras soluciones, como por ejemplo cambiar de zona para no perder el confort que pretenden en la propiedad”, dice Franco Acosta.
Luego comienza el rastreo del inmueble, siempre enfocado en los intereses precisos de los clientes. Y, una vez que se selecciona la vivienda, se realiza un estudio de mercado para determinar si el precio es o no competitivo. “Con esto hacemos una oferta”, explica.
“Si finalmente se logra el acuerdo guiamos a los clientes hasta la escritura. Para ello hay que pedir informes, revisar la titularidad del inmueble, verificar que no existan gravámenes y que no posea deuda de ningún tipo. Nos ocupamos de todo eso y más", cierra Acosta.
Cinco claves de Franco Acosta Inmobiliaria (a la hora de comprar)
- Estrategia de búsqueda focalizada basada en los intereses del cliente
- Acceso a todos los inmuebles disponibles en la zona
- Información detallada del estado del inmueble
- Asesoramiento jurídico
- Estrategia de negociación
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