“Es un momento crucial para la industria del fútbol, porque ahora las personas comunes pueden acceder a un mercado históricamente exclusivo”, señala Valentín Jaremtchuk, CEO y cofundador de Win Investments. "Completar este ciclo valida nuestro modelo y abre nuevas oportunidades de democratización financiera", agrega.
El éxito de la tokenización
Conechny fue uno de los primeros futbolistas tokenizados por Win en febrero de 2023. Por solo un euro, usuarios adquirieron tokens que representaban un porcentaje de sus derechos formativos, apostando a una futura transferencia. Esa apuesta rindió frutos este año, cuando su pase se concretó por € 2,105,000, generando dividendos que alcanzaron un 248% de retorno. Es decir, por cada 100 euros invertidos, los usuarios recibieron 348 euros.
Los detalles de la operación y los retiros se gestionan desde los perfiles individuales de los usuarios, con opciones de retiro que incluyen cuentas bancarias, billeteras digitales como Mercado Pago y billeteras Web3.
Un mercado en expansión
Win Investments ya cuenta con 103 futbolistas tokenizados en clubes de la región, incluyendo nombres destacados como Alexis Mac Allister, Emiliano "Dibu" Martínez y Nicolás González. Hasta la fecha, 18 jugadores han sido transferidos, y los dividendos comenzarán a distribuirse progresivamente.
“Este modelo ha transformado el mercado de pases en una oportunidad única para los inversores”, explica Jaremtchuk. La colaboración con FIFA, mediante herramientas como el sistema TMS y la cámara de compensación, ha optimizado los flujos de pago hacia los clubes formadores, asegurando retornos más consistentes.
Un futuro prometedor
El mercado de pases sigue creciendo. Según la FIFA, este año se realizaron 11,000 transferencias internacionales, con un gasto total de 6,460 millones de dólares, la segunda cifra más alta de la historia.
“Hemos demostrado que la tokenización puede ser una vía estratégica para financiar clubes y diversificar ingresos. Este primer caso exitoso es solo el comienzo de una nueva era para el fútbol y las finanzas”, concluye Jaremtchuk.
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