Desde aleros con pictogramas ancestrales hasta restos arqueológicos protegidos, Estancia Guayascate ofrece a sus visitantes la oportunidad de sumergirse en un entorno natural imperdible, donde cada rincón cuenta una historia ancestral.
Mario Dell Orsi, impulsado por un proyecto familiar, nos cuenta en este episodio cómo la idea de crear un espacio para celebrar cumpleaños y pasar fines de semana en familia se transformó en un destino turístico que atrae a viajeros que buscan explorar, conocer y degustar las delicias locales.
Uno de los aspectos más llamativos de Estancia Guayascate es su trasfondo gastronómico, influenciado por los hallazgos arqueológicos realizados en el lugar. Según cuenta Dell Orsi, antes de la pandemia, arqueólogos y biólogos del CONICET llevaron a cabo investigaciones que revelaron los hábitos alimenticios de los antiguos habitantes de la región. A partir de estos descubrimientos, surgieron las llamadas "comidas prehispánicas", elaboradas con ingredientes como la algarroba, la quínoa, los zapallos y los tubérculos nativos de la zona.
Los restos de camélidos y la cantidad de morteros encontrados en el lugar sugieren que alrededor de 50 a 60 personas vivían en la zona, con roles familiares claramente definidos: los niños mantenían el fuego encendido, las mujeres se dedicaban a las artesanías de cerámica y tejidos, y los hombres salían a buscar alimentos.
Una técnica interesante utilizada por los antiguos habitantes era la conservación de la algarroba mediante pozos y capas de ceniza, permitiéndoles tener este alimento disponible durante todo el año.
Como en cada ocasión que nos encontremos, reiteramos la invitación a sumarte, a seguirnos, a ser parte de esta movida que involucra a todos los cordobeses, porque todos #somosutuco.
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