A continuación, los 10 puntos que Linio recomienda tener en cuenta a la hora de comprar tu notebook ideal:
El tamaño: No tiene mucho sentido comprar un modelo ultraligero de 13 pulgadas si se va a usar en un escritorio la mayor parte del tiempo. Para eso, una notebook tremenda de 17 pulgadas es un buen reemplazo para una computadora de escritorio, tanto para el trabajo como para videojuegos. Por su parte un modelo de 15 pulgadas ofrece un balance decente entre prestaciones, la facilidad de uso y la portabilidad: siempre que pese alrededor de 2kg o menos, probablemente no sea incómodo llevarlo en el colectivo o en tren. Si lo que se busca es la movilidad, una notebook con una pantalla de 11-13 pulgadas es lo más adecuado.
Resolución de pantalla: La resolución mínima que se encontrará generalmente es de 1.366 x 768 píxeles. Esto está bien para la mayoría de las tareas. Si bien la regla general es que la resolución más alta significa que el texto y los íconos serán mucho más suaves y, por lo tanto, más fáciles de ver, en notebooks con pantallas más chicas, una resolución más grande no siempre significa más espacio.
Formato: Algunas computadoras portátiles mantienen la forma tradicional, pero agregan una pantalla táctil y otras ofrecen pantallas plegables, convirtiendo la notebook en una Tablet, conocidas como 2 en 1. Estas Tablets especializadas son mucho más caras que las PCs portátiles estándar. Si no se está 100% seguro de que se necesite esta flexibilidad, probablemente sea mejor elegir una convencional.
Teclado: Solo algunas notebooks tienen espacio para un teclado numérico; muchas tienen teclas de flechas muy chicas o la barra espaciadora invertida, que está a la derecha en lugar de a la izquierda del teclado; y solo algunas computadoras portátiles tienen teclas de Inicio, Fin y Re Pág y Av Pág. Si se usa estas teclas para navegar alrededor de un documento de texto, entonces se deberá buscar un equipo donde todas estas funciones se repliquen mediante teclas físicas separadas.
Touchpad: El touchpad es el medio más importante para interactuar con una notebook y la facilidad de uso de estos gestos varía ampliamente entre los distintos modelos. La mayoría de los paneles táctiles modernos son compatibles con los gestos, en los que podés usar dos dedos para desplazarte o pellizcar para hacer zoom, pero no todos responden con precisión.
Conectividad: Algunas computadoras portátiles tienen solo dos puertos USB y un lector de tarjetas SD incorporado, y las más modernas no tienen unidades de CD/DVD integradas. Con respecto al internet, aunque todas tienen una red inalámbrica incorporada, no todas tienen un conector Ethernet. Las salidas de video también son importantes: HDMI es la salida de video más común en notebooks, que sirve para conectarse a la mayoría de los televisores y monitores. Solo algunos modelos de negocios ahora tienen salidas VGA, que es posible que necesites conectar a un proyector de oficina.
Rendimiento: Lo primero que hay que ver es la memoria RAM. A menos que se esté comprando una notebook ultra barata, lo mejor es ir por al menos 4 GB. Si se trabaja editando videos, lo ideal es ir al menos por 8 GB. Con respecto al procesador hay que buscar al menos a un procesador Intel Core i3, que pueda manejar cómodamente la navegación web y el trabajo de oficina, y considerar un Core i5 para tareas más intensivas, como tratar imágenes grandes y editar videos. Los productos con chips Core i7 son caras pero súper rápidas, por lo que vale la pena considerarlas si se espera obtener el mejor rendimiento posible. Hay, por supuesto, computadoras portátiles que funcionan con AMD en el mercado. Buscá un procesador AMD A8 o A10 para asegurarte de que no vas a tener problemas.
Gráficos: Este es un punto a tener en cuenta para los Gamers. Solo si vas en serio con los videojuegos vas necesitar una notebook con una tarjeta de video dedicada, ya sea Nvidia o AMD.
Duración de la batería: Las notebooks más chicas y livianas generalmente ofrecen una duración de batería superior a los modelos más grandes, principalmente debido a que están equipadas con procesadores de bajo voltaje menos potentes y una pantalla más pequeña.
Almacenamiento: La gran mayoría de las computadoras portátiles tienen espacio para un solo disco. Algunos equipos tipo netbook muy baratas como la Acer Aspire One Cloudbook 14 tienen 32 GB de almacenamiento, que es apenas suficiente para Windows 10 y algunas actualizaciones descargadas. La recomendación es un mínimo de un SSD (disco de estado sólido) de 120 GB, y eso solo si se almacena la mayoría de los archivos en la nube. Si la notebook está destinada para uso doméstico y para almacenar gigabytes de fotos y música, hay que optar por un modelo con al menos 500 GB de almacenamiento. Algunas tienen unidades híbridas “SSHD”, que combinan un disco duro mecánico lento (HDD) con un pequeño caché SSD. Estas unidades almacenan datos de uso frecuente, por lo que pueden acelerar los tiempos de arranque y hacer que los programas que usas con mayor frecuencia se carguen más rápido. Son un buen compromiso si no se llega a un SSD grande.
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