Power Balance: semejanzas y diferencias con creer en un dios y rezarle a una estampita
Marta Jimenez: "Íñigo, ¡sí es un fraude! Ni siquiera tiene efecto placebo según lo demuestran estudios reales, científicos. Que lo compares con la religón, es una desubicación tuya y del vendedor (de humo). Y que lo comparen con Buda demuestra ignorancia... Buda sí existió, fue un hombre, no un dios, como algunos occidentales creen. Gracias por dejar expresarme".
Nelson Negretti: "Chicos, les cuento que toda mi vida hice ejercicio físico y hace un par de años dejé de entrenar por la facultad. Como varios al principio pensaba que era una tontería lo de la pulsera, después un amigo me mostró un ejercicio, y mi experiencia fue sentir que tenía una tensión muscular como cuando entrenaba... fue una pavada, o sea, yo no la compré pero sí sentí un cambio. Tengo que aceptar que siempre fui amante del poder oriental sobre la meditación y la energía (algo que los occidentales nunca vamos a poder entender) y creo que esta pulsera puede tener algún tipo de energía, pero son esas cosas que no se pueden comprobar, como la fe o los milagros... No estoy a favor de que gente se haga millonaria por esto y creo que es exageradísimo ese precio, pero sí pienso que puede sacar el máximo rendimiento que tiene cada uno...".
La pulserita que ya vendió por más de un millón de dólares y las opiniones en contra y a favor, aquí.
Marta Jimenez: "Íñigo, ¡sí es un fraude! Ni siquiera tiene efecto placebo según lo demuestran estudios reales, científicos. Que lo compares con la religón, es una desubicación tuya y del vendedor (de humo). Y que lo comparen con Buda demuestra ignorancia... Buda sí existió, fue un hombre, no un dios, como algunos occidentales creen. Gracias por dejar expresarme".
Nelson Negretti: "Chicos, les cuento que toda mi vida hice ejercicio físico y hace un par de años dejé de entrenar por la facultad. Como varios al principio pensaba que era una tontería lo de la pulsera, después un amigo me mostró un ejercicio, y mi experiencia fue sentir que tenía una tensión muscular como cuando entrenaba... fue una pavada, o sea, yo no la compré pero sí sentí un cambio. Tengo que aceptar que siempre fui amante del poder oriental sobre la meditación y la energía (algo que los occidentales nunca vamos a poder entender) y creo que esta pulsera puede tener algún tipo de energía, pero son esas cosas que no se pueden comprobar, como la fe o los milagros... No estoy a favor de que gente se haga millonaria por esto y creo que es exageradísimo ese precio, pero sí pienso que puede sacar el máximo rendimiento que tiene cada uno...".
La pulserita que ya vendió por más de un millón de dólares y las opiniones en contra y a favor, aquí.