Mar 15/11/2016
Mientras Uber se desangraba en una pelea con las autoridades y los taxistas que llevó al bloqueo de los pagos con tarjetas de crédito local, Cabify fue avanzando en silencio, cumplimentando el marco jurídico de la Ciudad de Buenos Aires, la primera donde hicieron pie en Argentina.
Guillermo Minieri es formalmente el presidente de la sociedad constituida formalmente en Argentina de esta “solución de movilidad” que, si bien está asentada básicamente en autos con chofer, incluye motos (en Perú), helicópteros (en México) y que en su marco conceptual no se cierra a ninguna otra alternativa para trasladar pasajeros. Haciendo los números que le supone a una persona moverse en su propio auto (seguro, estacionamiento, multas, arreglos, depreciación), Minieri está convencido que a muchos les convendría relajarse en el asiento de atrás, ir trabajando en su dispositivo móvil mientras un chofer de Cabify hace el trabajo pesado.
En Esmeralda 950, casi Paraguay, cuando uno levanta la vista se encuentra con los 25 pisos de la Torre Bellini, recién terminada por fuera y en marcha frenética por dentro para que -el 1 de mayo- abran los primeros pisos de WeWork, el sistema de alquiler de oficinas y escritorio que está cambiando la forma de trabajar en las grandes ciudades.